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Spain Spain · Oviedo
Gould rating:
8
Thriller. Action Joey Tai (John Lone) becomes the head of New York's Chinese mafia through ruthless violence. Stanley White (Mickey Rourke)is the cop in charge of Chinatown. Driven by hatred, he breaks every rule and custom to bring down the leader of the Chinese underground.
Language of the review:
  • es
August 16, 2017
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Stanley White es un policía destinado al barrio de Chinatown en New York decidido a acabar con las luchas entre las mafias chinas. De carácter impulsivo, concibe la lucha contra estas como si fuese la lucha contra el Vietcong en la guerra de Vietnam. Su carácter vital pero abusivo, casi dictatorial, quema todo lo que hay a su alrededor incluida la mortecina relación con su mujer.

Producida por Dino de Laurentis, la película es muy atractiva y entretenida, está soberbiamente narrada, con una puesta en escena muy clásica y un impecable ritmo que bebe en la fuente de los habituales códigos del género, en el relato mil veces contado del policía de vida personal desastrosa que ocupa obsesivamente todo el tiempo en su trabajo descuidando su vida personal.

Sin embargo, el brillante guion de Cimino y Oliver Stone -modélico, tenso y, hasta cierto punto, llevado con contención en los dos primeros tercios de la película- se desequilibra y afea por completo en el último tercio de película, para acabar convertido en un carnaval de sangre algo ridículo e innecesario. Por otro lado, paradójicamente, una de las mayores virtudes de la película, el magnético protagonismo de Mickey Rourke, acaba por convertirse también en su mayor defecto, al estar demasiado al servicio del actor, ligeramente sobreactuado, pero al que no se le puede negar un poder de convicción extraordinario –eso sí, para los “cinéfagos” siempre será “El chico de la moto” de “Rumble fish” (1983, La ley de la calle) de Coppola-.

Sombras todas ellas que afean las numerosas y admirables luces para el que podía haber sido el mejor thriller de los años 80. Aun así, merece mucho la pena disfrutar con este clásico de los 80 con sus desmesuras, excesos e imperfecciones, pero también con sus enormes virtudes.
Gould
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