Click here to copy URL
Spain Spain · K-PAX
PROT rating:
8
Comedy When "The Dude" Lebowski is mistaken for a millionaire Lebowski, two thugs urinate on his rug to coerce him into paying a debt he knows nothing about. While attempting to gain recompense for the ruined rug from his wealthy counterpart, he accepts a one-time job with high pay-off. He enlists the help of his bowling buddy, Walter, a gun-toting Jewish-convert with anger issues. Deception leads to more trouble, and it soon seems that ... [+]
Language of the review:
  • es
September 15, 2008
5 of 9 users found this review helpful
Me pasa siempre: encuentro similitudes entre los guiones de los Coen y los libros de Franz Kafka, qué le voy a hacer. Hecha esta afirmación aclaro también que a mi modo de ver Franz Kafka es uno de los mayores genios en la historia de la Literatura y, por supuesto, el más grande mago de la interactividad con el lector.
La conexión de los hermanos Coen con los televidentes es indudable; ellos, los Coen, también son unos magos, desde luego.
El guión de EL GRAN LEBOWSKI está salpicado de elementos kafkianos, de ese tipo de circunstancias que consiguen que te revuelvas en la silla inquieto por la rareza de la situación o nervioso porque el protagonista no actúa de una manera que bajo tu punto de vista sería la más acertada. Pero con independencia de ello, y porque el personaje de El Nota trasciende sin género de duda de su escalón de personaje ficticio, se puede apuntar casi con toda certeza que EL GRAN LEBOWSKI es la película más directa de los Coen.
Yo bien pudiera presentar a los honorables miembros de este foro a diez o doce "Notas", a diez o doce "Notísimas", a diez o doces "Notarinos". Evidentemente El Nota es un antihéroe, pero pocas veces un antihéroe aparece ante los ojos del público dotado de tanto atractivo: un atractivo tan fulgurante que puede conseguir que pateando a una piedra en este mundo de hoy uno se pueda encontrar a un par de Notas o que puede conseguir, incluso, que una de nuestras señorías nos presente su crítica bajo el título: algún día seré como El Nota.
Es verdad que el magnetismo natural del protagonista ayuda, que nadie se va a parar a pensar cómo El Nota se costea sus gastos sus petas o sus rusos blancos, que nadie va a acordarse de una hipotética ley de vagos y maleantes. Los Coen ya nos han captado con una introducción ilusionante y con un Jeff Bridges maravilloso y nos voltearán a su gusto, nos llevarán de acá para allá, de allá para acá otra vez, nos bañarán en su salsa de la hilaridad total, nos van a poner su puntito de sal y nos prepararán para que, cuando acaben los títulos de crédito finales de ese precioso instrumento al servicio del bienestar que es EL GRAN LEBOWSKI, hasta los más imperturbables de entre nosotros pensemos como nuestro compañero: una mañana de éstas me convierto en un Nota.
PROT
Did you find this review interesting and/or helpful?
arrow