Sacacuartos. El oso. Falcon Crest.
Me confundí de película, pensé que era La matanza del día de San Valentín, no doy una, y se me hacía la boca agua imaginando a todo el elenco, hasta las trancas de ello, que se iba por fin felizmente al muere, por el sumidero, holocausto salvaje, aquelarre caníbal, esa escabechina que nos prometían, esa masacre: ven y mira, agonía, nos lo debían, destrozaterrones, los dedos no tan huéspedes, más bien invitados a una (frustrada masiva) decapitación, y al final nada, mi gozo en un pozo, el desencanto, el aprendizaje de la decepción, vamos, bueno, casi que mejor el amor, mayor dolor, un sufrimiento más extendido en la sábana del tiempo, a fuego lento, a fuego viejo, sigue avivando nuestra llama, cruel tormento, morirás igualmente, pero tras tanto mucho más espanto del bueno.
Ay si Al Capone los hubiera cogido a tiempo, ni uno vivo, por banda, se iban a quedar guapos, arreglados para los restos, gloria lleven como paz dejan, maldita sea su estampa, esa inadecuación temporal espacial.
Taylor Swift (Michelle Pfeiffer + el ratoncito Perez) y, sí, Taylor (también, no es joda) Lautner (Josh Brolin + Arnold Schwarzenegger + el hombre de cromagnon), es la única historia, además de ser los mejores actores, con un poquito de gracia y salero, decoro y respeto, a los demás el puto director los trata a patadas, como a ganado, a baqueta, con demasiado escarnio, es una sátira muy exagerada, de mal gusto tanta ira/saña, se ceba con esa pobre gente, la manada, vale que lo tenían requetemerecido, pero tampoco era necesario que se riera tanto de ellos, que los humillara así, de esa mala manera, retratarlos tan tontos, de no creerse, hasta el extremo, la muerte dolorosa, el genocidio, la exterminación al mogollón, el fin es tu único amigo, como ya dijimos, sí, eso claro que sí, sin duda, la parodia y la carcajada y la ofensa y el sarcasmo no tanto, lo primero es hermoso, necesario, hay que purgar los pecados, lo segundo causa sonrojo, apuro, un mal rato.
A cada cual mejor actuación o interpretación, pero qué decir de... ese/eso, muy por ejemplo.