Producida por George Lucas y Francis Ford Coppola. La sombra del guerrero es un excelente film premiado en numerosos festivales, con una fotografía y banda sonora exquisitas y un guión memorable. El final de la película es simplemente perfecto, Kurosawa provoca con su impecable dirección que te tiemblen las piernas.

KAGEMUSHA EL IMPOSTOR
Shingen, un poderoso caudillo, ha alcanzado tanta fama como el lema escrito en su estandarte de guerra “Rápido como el viento, sereno como el bosque, fiero como el fuego, inmóvil como la montaña”. Mientras yace agonizante por las heridas sufridas en el combate, Shingen ordena a sus guerreros que encuentren a un doble que le sustituya, para mantener su muerte en secreto e impedir que sus enemigos aprovechen la circunstancia para atacar. El kagemusha (la sombra del guerrero) es un pequeño delincuente que debe hacerse pasar por un gran líder y erigirse en comandante de una gran alianza de 25.000 samuráis.

KUROSAWA EL MAESTRO
Akira Kurosawa, un magistral director, ha alcanzado tanta fama con sus películas que dicen de él: “Es uno de los candidatos al mejor director de la historia. Genuino maestro. Nadie ha superado la maestría de Kurosawa en la técnica cinematográfica”. Mientras parecía muerto en su país natal, a pesar de “Los 7 samuráis”, “Vivir”, “Yojimbo”, “Rashomon”, “Trono de sangre” (nunca Macbeth fue tan bella), “El infierno del odio”, y otras tantas; emigró a la URSS “Dersu Uzala”, para demostrar que aún le quedaban muchas batallas por librar, “Ran”, etc. Kurosawa (la maestría del cine) es un pequeño tesoro oriental que se ha hecho hueco entre los más grandes y lidera la historia del cine junto a la alianza de los elegidos, llamados Chaplin, Murnau, Lang, Kubrick, Welles y pocos más, pero no 25.000 samuráis, puede que siete.

EL VIENTO, EL BOSQUE Y EL FUEGO QUEDARON CON LA MONTAÑA…Y LA MONTAÑA ACABÓ POR MOVERSE.