McG es el apodo abreviado de Joseph McGinty Nichol, director y productor estadounidense especializado en películas de acción y cuya autoría se le atribuye la adaptación a la gran pantalla de la serie de los años setenta “Los Angeles de Charlie” y que reunió a Cameron Díaz, Drew Barrymore y Lucy Liu. Todo un fiasco para los que les gustaban de un cambio de tendencias en el género: escasez de originalidad con un exceso de recursos a su favor bien quedaba como un “blockbuster” digno de ser un entretenimiento para cubrir las horas aburridas de una tarde sábado o domingo por ejemplo.

Lo mismo ocurre con ésta coproducción en que la sombra de Luc Besson (todo un especialista en destrozar el mobiliario urbano de París) se discurre como una cita para pertinaces y tozudos fans del cine de acción combinado con el drama familiar. Un retirado agente de la CIA, Ethan Renner (Kevin Costner) accede forzosamente a la petición de una letal compañera de trabajo (Amber Heard) para dar caza de una vez por todas a un peligroso traficante de armas apodado el Lobo (Richard Sammel). Ni que decir que estará en juego la vida de su ya de por si desestructurada familia; una despechada esposa (Connie Nielsen ) y una hija, Zooey (Hailee Stenfield) en plena edad del pavo capaz de montársela con cualquiera en los lavabos de una discoteca con tal de llamar la atención a su papá a la que casi nunca ha visto por razones, evidentemente, profesionales.

Lo Mejor: puestos a decir, las escenas de acción
Lo peor: el argumento de una simplicidad tan tosca como vacía de recursos