Que ‘La gran familia española’ es una comedia dramática con un importante homenaje al film ‘Siete novias para siete hermanos’ (‘Seven brides for seven brothers’, Stanley Donen, 1954) es indudable. Ahora bien, no es una obra que durará en tu memoria más allá de unos minutos desde que abandones la sala de cine. Una película que cuenta, tanto con actores que rozan la perfección que sus personajes requieren, como con otros que no pasan de ser una cara bonita.

El último film de Sánchez Arévalo nos cuenta la peculiar historia de un padre de familia que quiere imitar la situación de la comentada ‘Siete novias para siete hermanos’. El hermano menor decide casarse el mismo día de la final del mundial, durante el partido “España – Holanda”. La obra nos muestra a una familia hecha añicos, pero que aun así no pierde la unidad que le caracteriza.

He de decir que sufro un pequeño dilema con esta película, pues me es difícil decidir si me ha emocionado más que las risas que me ha provocado. Dilema inexistente a la hora de hablar, por ejemplo, de la buenísima dirección de fotografía o de las interpretaciones que hacen que la obra se enriquezca minuto a minuto. Entras a la sala de cine con una concepción de la película que, poco a poco, va cambiando con los hechos que se suceden y con la evolución propia de los personajes.

Me veo, por cierto, en la obligación de mencionar a Raúl Arévalo y su magnífica actuación; que aunque que breve, es bastante intensa, llegando a dejar claro que se merece un papel más protagonista. Aún así, nos brinda estupendos momentos cómicos de lo que es un claro homenaje a ‘El guateque’ (‘The party’, 1968) de Blake Edwards.

Como ya he comentado, la historia gira temporalmente alrededor de la final del mundial entre España y Holanda, pudiéndose encontrar varias similitudes entre el propio partido y la vida de los hermanos protagonistas. Sin destripar mucho, se podría decir que el que España gane o pierda es casi indiferente; es mas un duro camino que hay que recorrer (con prórroga incluida) para poder llegar al gratificante final soñado. Todos, de alguna manera u otra, necesitamos que España gane para estar en paz tanto con uno mismo como con los demás.

En definitiva, es una película imperfecta, pero que a ratos te emociona y te hace reír, y que consigue que te enamores de personajes como Benjamín, llegando a querer que forme parte de tu propia familia.

Ariadna G. Gázquez

http://cinefilosempedernidos.com/2013/10/09/critica-la-gran-familia-espanola/