Esta primera película de Nolan, de corta duración y disponible en "Youtube", hace todo bien con las posibilidades que tiene. Con un presupuesto microscópico, seduce con los métodos a disposición: un guión soberbio, acompañado de una edición que ayuda a elevar la tensión secuencia a secuencia, con una historia que se enfoca en el misterio y la interacción de los personajes a los que vamos conociendo de a poco.

Y de a poco la película va desvelando pequeños secretos que "dan color" a la historia principal, y con giros incluidos, atrapa y sorprende en la conclusión, que no necesita de millones de dólares para ser efectiva. Así como el talentoso de Darren Arronofsky falló en un interesante intento con su "Pi", película de bajo presupuesto del mismo año, Nolan demostró que la capacidad para contar una historia interesante va más allá de los dólares cuando se es un genio absoluto desde el mismísimo comienzo.