Uno de mis westerns favoritos. Expectacular de principio a fin, y con un par de escenas memorables: el final, por supuesto, y el pseudoenfrentamiento de los vaqueros contra el ejército junto a las vías del tren.
Jennifer Jones, explosiva y sensual, incluso exagerando poses, y Gregory Peck en un papel que no repitió muchas veces, encabezan un reparto fantástico.
Esta es una de esas películas que he de ver cada cierto tiempo, porque el tiempo nunca pasará para ella.