Primero de todo hay que añadir, que estos “resacones”, es de lo mejor que se ha hecho en los últimos años dentro del género cómico, y por eso es tan atrayente para el gran público y sobre todo para la cartelera y no parecería raro que hubiera una tercera entrega (Resacón en Ibiza).

Para conseguir estar donde está, ha ayudado mucho la decaída de las películas de humor de los últimos años, donde los chistes y skechts, estaban faltos de originalidad y la mayoría forzados, en cambio en estos films, estos aparecen de lo más natural e ingenioso, gracias a dos motivos sustanciales, uno son las situaciones caóticas que se nos muestran, y aunque suelen ser parte fundamental de toda película cómica, aquí este desorden incoherente acaba convirtiéndose en su mejor arma y eso se debe al segundo motivo, y es al guión, que ordena todo ese enredo, desligando todo lo caótico y formando un luminosa y cristalina fecundación artística, que hace que adultos y jóvenes se diviertan y sobre todo, que ejerciten uno de los artes más antiguos, que es la carcajada.

También ayuda mucho la elección de los actores, muchas veces se recurre a los típicos y encasillados arcaicos actores que tienen poco que ofrecer dentro del género y eso es un error, hay que buscar sabia nueva, como en este film, y hay que definirlos sin llegar a caricaturalizarlos, dándole personalidad propia y sobre todo cierta naturalidad, es la mejor formula, donde ninguno sobresale, todos tienen sus importancia y ninguno destaca sobre el resto.

Lo último que añadiré, es que el mejor elemento incorporado a esta segunda parte, es el mono, es la leche, por todas sus implicaciones y parte fundamental del film.