Llevaba muchos años detrás de esta película y tras casi 20 años por fin tuve la oportunidad de verla.

En verdad, tenía más o menos claro lo que me iba a encontrar. Es una buena película, de eso no hay duda, pero que te o guste o no depende de que tu sentido del humor conocida con el de Wes Anderson. En mi caso coincide poco, aunque reconozco que tiene algún punto que sí me hizo reír.

La peli recuerda mucho a típico cine francés con tintes de realismo mágico. Se la puede poner pocos "peros". Su reparto es la leche, de hecho, pocas pelis recuerdo con tanto actorazo pero tampoco es que se luzcan mucho. La fotografía es buena, algunos efectos especiales son curiosos (aunque se notan que también son baratos), hay mucha imaginación, los diálogos son ingeniosos, la banda sonora está muy bien. Todo es bueno, pero te tiene que gustar Wes Anderson. El principal problema que vi es que la historia y los personajes me resultaron poco interesantes y se acaba haciendo larga en algunos tramos.

No la recomendaría a la ligera a cualquier persona. Tiene un estilo muy personal lo que limita a un tipo de espectador concreto. Le doy un 6 porque, aunque hubo tramos que me aburrió, el final deja un par de conceptos y frases que me gustaron mucho. Con esto no os esperéis un grandísimo final, porque no lo tiene, . Es algo, más bien, personal.