¡Goooooooooood Moooorning, Vietnam!

Adrian Cronauer (Robin Williams) es un pinchadiscos de la radio oficial del ejército de los Estados Unidos, que es enviado a Saigón con la misión de revitalizar las locuciones de la mencionada emisora, encargada de informar y entretener a los soldados desplegados en la Guerra de Vietnam durante el año 1965.

La llegada de Cronauer a la emisora supone un bálsamo para los combatientes americanos, que ven como el nuevo locutor dota a la radio de un estilo completamente diferente al de sus aburridos antecesores, que se limitaban a ofrecer música e información en un tono soporífero. Las simpáticas y dicharacheras locuciones de Cronauer, que tiene como ayudante a un tímido soldado interpretado por un nada despreciable Forest Whitaker, gustan a la tropa pero no al teniente Houk, estricto defensor de lo políticamente correcto que supondrá un duro obstáculo para el charlatán pinchadiscos desde el mismo día de su llegada a la emisora.

Una buena comedia dirigida por Barry Levinson (Rain Man y La cortina de humo) que sabe aprovecharse de las facultades de Robin Williams y Forest Whitaker para ofrecernos un film en el que conviven a la perfección comedia y drama, y que cumple con la difícil tarea de convertir la desgracia en algo, no divertido, pero si menos trágico.