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Yo mismo (o no) rating:
1
6.3
6,403
Romance. Drama
Binoche plays a gallery owner living in a Tuscan village who attends a lecture by a British author (opera star William Shimell) on authenticity and fakery in art. Afterward, she invites him on a tour of the countryside, during which he is mistaken for her husband. They keep up the pretense and continue on their afternoon out, discussing love, life and art, and increasingly behaving like a long-married couple. But are they play-acting on ... [+]
Language of the review:
- es
August 26, 2011
7 of 13 users found this review helpful
Me sorprende (y aún más leyendo ciertas críticas) la alta nota que le dan los "intelectuales" y "entendidos" en cine a esta pseudo-película. Aunque se presupone que del 8 para arriba se lo ponen por aquello de apellidarse Kiarostami el director.
Para ir por partes: en primer lugar, la película (siempre siendo benevolentes con el concepto) carece de historia o de hilo argumental, lo que hace que sea difícil (y en este caso imposible) seguirle el rollo, lo que la convierte en un aburrimiento desde los cinco primeros minutos. Uno se da cuenta cuando ve que las escenas continuamente son exageradamente largas, produciendo los primeros bostezos.
En segundo lugar, encuento la más de hora y media que dura una absurda divagación que nos quiere llevar ¿a dónde? ¿Al arte? ¿Al concepto de matrimonio y/o familia? Ni idea.
Para continuar, está muy bien eso de ser un ensayo, pero... ¿es necesario hacer un ensayo literalmente?
En fin, que viendo ciertas críticas y ciertas puntuaciones, no puedo más que quedarme con cara de circunstancias al no haber pillado la esencia ni el concepto, pero también me quedo con una gran satisfacción al no haber invertido ni un euro en esta tediosa película.
Para ir por partes: en primer lugar, la película (siempre siendo benevolentes con el concepto) carece de historia o de hilo argumental, lo que hace que sea difícil (y en este caso imposible) seguirle el rollo, lo que la convierte en un aburrimiento desde los cinco primeros minutos. Uno se da cuenta cuando ve que las escenas continuamente son exageradamente largas, produciendo los primeros bostezos.
En segundo lugar, encuento la más de hora y media que dura una absurda divagación que nos quiere llevar ¿a dónde? ¿Al arte? ¿Al concepto de matrimonio y/o familia? Ni idea.
Para continuar, está muy bien eso de ser un ensayo, pero... ¿es necesario hacer un ensayo literalmente?
En fin, que viendo ciertas críticas y ciertas puntuaciones, no puedo más que quedarme con cara de circunstancias al no haber pillado la esencia ni el concepto, pero también me quedo con una gran satisfacción al no haber invertido ni un euro en esta tediosa película.
SPOILER ALERT: The rest of this review may contain important storyline details.
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Spoiler:
Los primero diez minutos son crueles. ¿Una disertación de las obras de arte así? ¿Por la cara? ¡Anda ya!
De repente, una camarera comienza a divagar con la protagonista de buenas a primeras, como algo tan natural. ¿Alguien lo entiende? ¿Qué le dice al oído? ¿Acaso importa?
Cuando la novia viene a buscar al protagonista para que se saque una foto con ellos, el sitio de éste es ocupado por otra recién casada, que tiene tal estado de nerviosismo y de preocupación... Mi pregunta es: ¿estará tan preocupada por salir en semejante bodrio de película?
De pronto, la protagonista comienza a hablar con una pareja de turistas, con unos diálogos que se confunden con el ruido de la plaza. A ver, ¿no son importantes? ¿Ven lógico que los turistas sean tan especialistas en arte como ellos? Yo sigo alucinando...
Por último, se toman enserio que son pareja definitivamente en el restaurante. Es absolutamente desconcertante e ilógico lo que de ahí deriva (contando el final, que deja cara de tonto al que ha malgastado tanto tiempo para llegar a ese punto, yo incluido).
De repente, una camarera comienza a divagar con la protagonista de buenas a primeras, como algo tan natural. ¿Alguien lo entiende? ¿Qué le dice al oído? ¿Acaso importa?
Cuando la novia viene a buscar al protagonista para que se saque una foto con ellos, el sitio de éste es ocupado por otra recién casada, que tiene tal estado de nerviosismo y de preocupación... Mi pregunta es: ¿estará tan preocupada por salir en semejante bodrio de película?
De pronto, la protagonista comienza a hablar con una pareja de turistas, con unos diálogos que se confunden con el ruido de la plaza. A ver, ¿no son importantes? ¿Ven lógico que los turistas sean tan especialistas en arte como ellos? Yo sigo alucinando...
Por último, se toman enserio que son pareja definitivamente en el restaurante. Es absolutamente desconcertante e ilógico lo que de ahí deriva (contando el final, que deja cara de tonto al que ha malgastado tanto tiempo para llegar a ese punto, yo incluido).