Fernando León de Aranoa presenta su película con unas imágenes reales de revueltas sindicales y manifestaciones violentas sucedidas en la ciudad de Vigo como protesta al cierre de los astilleros que acarreó la reconversión industrial a principios de milenio.

Los lunes al sol nos lleva de la mano de sus 3 personajes principales a vivir el drama social de unas personas en paro tras el vuelco que dan sus vidas al ser despedidos de un trabajo que lo era todo para ellos. Resignación, impotencia, rabia y hastío son las principales emociones reflejadas en Santa, José y Lino en una España en la que se hacía casi imposible rehacer tu vida y reingresar en el mundo laboral con una edad avanzada y sin más experiencia que la de un empleo ya inexistente. Pero también se deja ver cierta esperanza, ganas de salir adelante y apego a las pequeñas cosas que aún se conservan en esta nueva y monótona vida en la que por suerte se tienen los unos a los otros.

Esta es una cinta profundamente humana, real y cruda, que refleja la amarga realidad de la clase trabajadora y retrata las diferentes respuestas de unos personajes a una tragedia que los azota a todos por igual. Un drama genialmente contado tan capaz de dejarte con un nudo en la garganta en una escena como de sacarte una sonrisa y hasta hacerte reír en la siguiente gracias a un sutil sentido del humor. Todo esto se refuerza con una música que acompaña perfectamente las escenas dramáticas y unas actuaciones especialmente destacables de Javier Bardem y Luis Tosar, dos de nuestros mejores actores.

Se convierte en una de mis películas favoritas del cine español.