Cuesta creerse que un tipo mediocre acepte un encargo en el que es más que evidente que su antecesor ha sido asesinado, pero ¿de verdad que alguien puede creerse que el tipo siga en el curro después del primer aviso? Sí, ya sé que el dinero motiva mucho, pero conservar el pellejo aún más. Y el personaje de MacGregor no parece ni muy ambicioso, ni muy valiente.

El manuscrito está guardado bajo siete llaves, pero el tipo mediocre es capaz de sacarlo de una casa llena de vigilantes de la manera más tonta.

No podía faltar el revolcón entre el escritor y la ex-second Lady (no es la primera, porque es la mujer del ex-Primer Ministro)

El secreto que oculta el libro es un MacGuffin de los más cutres del cine. ¿De verdad que la CIA mataría por eso?

Y sí, en el colmo de la originalidad, la CIA son los malos.

No me aburría tanto con un supuesto thriller político como desde que vi "Syriana". Hasta "Dave, presidente por un día" tiene más sustancia que esto.