Antes que nada debo decir que en España no se ha rendido a Miguel Servet el tributo que se merece. Un sabio de pies a cabeza, que en la serie está muy bien interpretado por Juanjo Puigcorbé. La serie, aparte de algún capítulo de baja intensidad, tiene momentos de magnífica sapiencia y carga dramática..

La ambientación es muy buena, bastante al detalle. Merecería la pena, en tiempos de series de todo pelaje, recuperarla y reponerla por parte de TV2.

Para terminar, recomiendo la lectura, antes o después de ver la serie, del libro de Stefan Zweig, "Castellio contra Calvino". Si lo hacéis, acompañaréis a Servet en su terrible suplicio.