Qué interesante y entretenida película es esta "Constantine" que se sacó de la manga el que fuera novato en ésto de dirigir, un Francis Lawrence que no tiene nada que ver con la actriz Jennifer Lawrence y que para ser la primera vez que dejaba de grabar vídeos musicales y se ponía tras las cámaras como director de cine, no lo hacía pero que nada mal. Una historia basada en un cómic que yo desconozco pero que te deja con ganas de hacerte con él, con un personaje principal, John Constantine, que da nombre a la película y con un Keanu Reeves que se siente super cómodo en este tipo de papeles de hombre solitario y atormentado como ya ha vuelto a reivindicar en sus dos películas de "John Wick". Junto a él, una bella Rachel Weisz, una de mis debilidades, capaz de dar personalidad a su detective Angela, actriz con gran química con Reeves con el que ya había trabajado anteriormente en "Reacción en cadena". Me ha encantado la tensión sexual no resuelta entre ellos dos a lo largo de toda la película. Con ellos tenemos la oportunidad de disfrutar de Tilda Swinton y Peter Stormare. La primera explotando estupendamente de nuevo su físico andrógino interpretando a un rebelde ángel Gabriel y el segundo, maravilloso como siempre, actor sueco que en esta ocasión da vida, ni más ni menos, que al mismísimo demonio. Un joven Shia LaBeouf daba muestras del potencial que tenía como actor, Pruitt Taylor Vince dejaba una correcta actuación y el atractivo Djimon Hounsou se comía la pantalla las pocas veces que aparecía. También destacar muy positivamente el ben hacer de un actor y cantante discreto como es Gavin Rossdale, ex marido de la cantante Gwen Stefani, y su atractivo personaje, Balthasar. Una muy entretenida película con unos efectos especiales para la época realmente buenos, con una imagen del infierno desoladora.
"No creo en el diablo" - "Deberías. Él cree en ti".
Un saludo,
Tess