El otro día daban por la tele la noticia de que el cine español iba cuesta abajo y sin frenos en lo que a espectadores en las salas se refería. Por lo tanto, mi amigo Eduardo y yo decidimos meternos en una producción de cine patrio para intentar subir un poco la media. No me imaginaba que iba a salir tan satisfecha de esa sala. Alberto Rodríguez, el director, no me había convencido con su primer trabajo, "7 vírgenes", por lo que estaba algo reticente a la hora de disfrutar de su última película. Tengo que reconocer que "Grupo 7" es una gran película. Tiene imágenes que se me han quedado en la memoria marcadas y secuencias como la de la humillación de los policías que son magníficas y difíciles de olvidar. Mario Casas está recibiendo muchos palos de los usuarios de esta página y sinceramente no entiendo el por qué. Además de tener un físico atractivo, este joven actor se está haciendo un hueco en nuestro cine. No le había visto en anteriores trabajos ni en el cine ni en la televisión pero creo que aquí cumple sobradamente con un papel que no es tan fácil como puede parecer en un principio. La evolución de su personaje es curiosa y está muy bien llevada a cabo. Creo que Casas se merece un poco más de confianza por parte de los espectadores. Antonio de la Torre está inmenso. El mejor de todos con diferencia. Su cara de amargura y resignación es apabullante y cada día está más espectacular como actor. Solo por él ya merece la pena ver la película. Junto a ellos dos desconocidos como son Joaquín Núñez y Manuel Poga, ambos más que correctos en sus papeles secundarios. Julián Villagrán también está sorprendentemente bien como drogadicto. En el lado femenino destacaría a Estefanía de los Santos como prostituta y a la joven Lucía Guerrero como interés amoroso de De la Torre. La guapa Inma Cuesta, sin embargo, tiene que luchar con un papel mucho menos desarrollado que el de sus compañeras. La ambientación en la Sevilla anterior a la Expo 92 está muy conseguida. Todo ello hace que "Grupo 7" sea una película más que recomendable que se hace amena desde el primer momento y que se pasa en un suspiro, bien contada y sobre todo muy bien interpretada.