"Mindscape" tenía todos los ingredientes para hacer que tuviera ganas de verla: el tráiler, entre terrorífico y fascinante; la actriz, Taissa Farmiga, por ser fan de la serie "American Horror Story" y teniendo así la curiosidad de verla desenvolverse en otros papeles o roles; el debut tan alabado de un director español en Hollywood y la trama de la película, entre innovadora y trillada. Pero porque tenga todos los ingredientes que te gustan no significa que el producto final te termine gustando, ya que hay otros condimentos que terminan arruinando la película, y aquí el que la ha arruinado ha sido el mismo artífice. La película comienza con fuerza, con clichés de otras pelis de suspense pero con elementos nuevos, como la técnica del "mindscape" de la que todo el mundo habla y de la que el espectador quiere saber cómo funciona y en qué acaba todo el experimento. No se puede culpar a los actores principales, a Strong y a Farmiga, ya que entre toda esa locura ellos mismos intentan que el guión no se hunda y que de todo el batiburrillo que se monta saliera algo coherente y decente, pero no se consigue, terminamos la película con mil dudas, sin saber qué y en dónde te has perdido, y el por qué de los cabos sueltos que ha dejado el director, y creo que no soy la única que piensa que "Mindscape" tiene un comienzo interesante y un final catastrófico según las críticas que he leído. También me decepcionó Taissa Farmiga: la chica actúa bien, está de diez aquí, pero pensaba que conseguiría alejarse del encasillamiento de la serie que la dio fama, pero el director le ha hecho un flaco favor ofreciéndole un papel similar, el de una chica un tanto "oscura" y algo "sociópata". La he puesto un 5 por el arranque, si fuera por el final la suspendería fácilmente.