Chris Columbus, director de dos de las películas que componen la saga Harry Potter y cineasta especializado en cintas de corte familiar, suyos son trabajos como Solo en casa (Home Alone) o Quédate a mi lado (Stepmom), se inspira en varias comedias juveniles tan populares como Todo en un día (Ferris Bueller's Day Off) o Supersalidos (Superbad) para dar cuerpo a La noche de su vida, donde se nos vuelve a narrar lo mismo de siempre pero de peor manera.

La historia es bien sencilla: joven feucho pero listo (Paul Rust) se enamora de una de las chicas más populares del lugar, Beth (Hayden Panettiere), pero no es hasta que se gradúan que éste se decide a declararle su amor… ¡delante de todo el mundo! A partir de ahí se suceden los equívocos, llegando a vivir, durante una noche, un sinfín de aventuras en las que se adocenan los malentendidos, las persecuciones e incluso el romance.

Pero Columbus se pierde en tópicos y se olvida de lo más importante: dotar de carisma a sus personajes. Tampoco ayuda demasiado que la narración se componga de una sucesión de poco inspirados gags visuales en los que predominan las carreras y los golpes. Por todo ello esta película sólo puede ser catalogada de olvidable, inofensiva pero olvidable.