A nivel mitomanía soy un soso. También suma lo rápido que mi mente pasa de una cosa a otra sin tampoco (salvo contadas ocasiones) pararse a darle muchas vueltas o ir ensalzando en un pedestal que acabe dejando una gran huella. Si repaso mis notas a Miyazaki y sus obras más clásicas, a todas (las que he visto, me quedan algunas) les puse un notable, pero no me hagas contar secuencias o escenas o incluso una sinopsis decente. 'El chico y la garza' creo que la recordaré algo más. Igual no porque sea de las mejores, pero quizá por alguno de sus elementos y especialmente porque es la primera del director que veo en pantalla grande. Y es que visualmente es una obra de arte.

A nivel narrativo puedes "sufrir" si no te entregas a ella. Puede resultar abrumador como va pasando a la carrera por localizaciones, personajes, criaturas...en un modo "vamos pa'lante, no mires mucho atrás ni te pares a pensar". Muchos momentos de dejarte con la boca abierta que piensas "pero profundízame en esto, que igual este elemento por si mismo ya da para una historia aparte". E incluso revelaciones argumentales vitales a las que no les da mayor importancia. Esto y la ausencia de un camino marcado claro y/o hacia un clímax quizá te hace pensar que pudo ser más emocionante en general o emotiva en particular, pero su caos de color y fantasía es parte de su mágico encanto.

Lo que parece un mundo abierto gigantesto e infinito con el universo, no deja de ser un micro universo que pese a la locura anteriormente mencionada, queda bien hilado en una obra a la que se ha puesto mucho mimo. Como curiosidad, me sorprende que se haya calificado como apta para todos los públicos, dado que tiene momentos bastante perturbadores e incluso que calificaría de terror.

En resumen, una gran experiencia y más a pantalla grande, donde además de su potencia audiovisual destaca su gran imaginación.