You must be a loged user to know your affinity with fulanqi
Críticas ordenadas por utilidad
Movie added to list
Movie removed from list
An error occurred

7.2
34,243
2
9 de febrero de 2024
9 de febrero de 2024
81 de 105 usuarios han encontrado esta crítica útil
Suele decir Houellebecq que no es necesario entender el mundo para vivir en él. Últimamente le doy muchas vueltas a esta idea. Yo, que soy un hombre empequeñecido por el postmodernismo, he decidido rebelarme, zafarme y renegar después de ver esta película.
En la sala, con los créditos finales, aplaudí irónicamente ante la sacadísima de este infame director, gran caradura. Digo que no logro comprender a mis congéneres porque la mayoría me acompañó en el aplauso con gran entusiasmo, celebrando la absoluta decadencia moral y estética de nuestro cine y de nuestro tiempo.
Bochornoso largometraje: vulgar, innecesario, depravado, inútil. "Feminismo" para indigentes mentales.
Buenas actuaciones de Emma Stone y Mark Ruffalo. Willem Dafoe, correcto, haciendo de sí mismo, como siempre. Le anoto algo por encima del 1 porque, ante la debacle, permaneció algo de belleza irreductible: Margaret Qualley.
En la sala, con los créditos finales, aplaudí irónicamente ante la sacadísima de este infame director, gran caradura. Digo que no logro comprender a mis congéneres porque la mayoría me acompañó en el aplauso con gran entusiasmo, celebrando la absoluta decadencia moral y estética de nuestro cine y de nuestro tiempo.
Bochornoso largometraje: vulgar, innecesario, depravado, inútil. "Feminismo" para indigentes mentales.
Buenas actuaciones de Emma Stone y Mark Ruffalo. Willem Dafoe, correcto, haciendo de sí mismo, como siempre. Le anoto algo por encima del 1 porque, ante la debacle, permaneció algo de belleza irreductible: Margaret Qualley.

8.4
83,813
10
25 de enero de 2018
25 de enero de 2018
10 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Los que no tenemos suerte en el amor creemos que esta es la película más romántica de la historia. Seguramente porque en el fondo nos identificamos con ese Jack Lemmon que nunca se atrevió a dar un paso adelante en las cosas que verdaderamente importaban y en cambio vendió su alma al diablo de su jefe por un puesto de administrativo en la decimocuarta planta de una multinacional cualquiera.
Caminamos solos bajo las luces de Central Park mientras otro se lleva a la chica, escurrimos los espaguetis con una raqueta de tenis porque ya no hay nada por lo que luchar.
Este peliculón nos enseña una realidad amarga pero irrefutable de este universo, y es que muchas personas nacen y mueren como simples donnadies, sin haber cambiado el mundo. Por eso, la única esperanza que a algunos nos queda es que, por absoluta casualidad (que así es como suceden las mejores cosas en esta vida), aparezca una chica como Shirley MacLaine, igual de solitaria que nosotros, para jugar una partida de cartas.
Gracias, Billy Wilder, por dejarnos soñar despiertos.
Caminamos solos bajo las luces de Central Park mientras otro se lleva a la chica, escurrimos los espaguetis con una raqueta de tenis porque ya no hay nada por lo que luchar.
Este peliculón nos enseña una realidad amarga pero irrefutable de este universo, y es que muchas personas nacen y mueren como simples donnadies, sin haber cambiado el mundo. Por eso, la única esperanza que a algunos nos queda es que, por absoluta casualidad (que así es como suceden las mejores cosas en esta vida), aparezca una chica como Shirley MacLaine, igual de solitaria que nosotros, para jugar una partida de cartas.
Gracias, Billy Wilder, por dejarnos soñar despiertos.

7.4
38,877
9
25 de enero de 2018
25 de enero de 2018
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Nunca he estado en Roma, pero ahora sé que es decepcionante.
Me la imagino como un truco de magia donde nada es real. Bla, bla, bla. Donde toda su desesperación, su lujo y su indolencia se esconden como en personajes y escenas de un pasaje de Macbeth:
“Life is but a walking shadow,
a poor player that struts and frets his hour upon the stage.
And then is heard no more.
It is a tale told by an idiot,
full of sound and fury,
signifying nothing.”
Yo, como Gambardella, sólo quiero llegar a casa para ponerme la cena, un vino y encender la televisión antes de irme a la cama.
O sea, no quiero nada.
Me la imagino como un truco de magia donde nada es real. Bla, bla, bla. Donde toda su desesperación, su lujo y su indolencia se esconden como en personajes y escenas de un pasaje de Macbeth:
“Life is but a walking shadow,
a poor player that struts and frets his hour upon the stage.
And then is heard no more.
It is a tale told by an idiot,
full of sound and fury,
signifying nothing.”
Yo, como Gambardella, sólo quiero llegar a casa para ponerme la cena, un vino y encender la televisión antes de irme a la cama.
O sea, no quiero nada.

6.0
75,816
9
16 de abril de 2022
16 de abril de 2022
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta es una de las películas de mi infancia. Otra de las películas que veía con mi abuela una y otra vez. Ahora mi abuela ya no está y yo he dejado de ser un niño, aunque creo no he perdido esa preciada virtud que uno olvida con la edad, que es la inocencia y que este tipo de películas ayudan a conservar.
Me siento a verla solo y escucho a mi abuela reír con ese monstruo verde que a mi en cambio me asustaba tanto.
Me vuelvo a quedar absorto en la escena del Coco Bongo, viendo cantar y bailar a Cameron Díaz.
Y Jim Carrey, joder, qué jodido geniazo.
Me siento a verla solo y escucho a mi abuela reír con ese monstruo verde que a mi en cambio me asustaba tanto.
Me vuelvo a quedar absorto en la escena del Coco Bongo, viendo cantar y bailar a Cameron Díaz.
Y Jim Carrey, joder, qué jodido geniazo.

6.3
3,015
7
8 de noviembre de 2023
8 de noviembre de 2023
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Creo que han pasado 5 ó 6 años desde que vi esta película por primera vez. Entonces no me dijo nada especial. Ahora la veo con un nudo en el estómago.
Siempre he dudado que historias tan profundas sobre nuestra condición no sean de alguna forma autobiográficas. Como Robin Williams cuenta a Matt Damon en ese icónico banco de Public Garden: algunas cosas sólo pueden vivirse.
Pero aquí la línea es finísima y es muy difícil separar realidad de ficción, el director del actor, el guión del diario:
Después de media vida separados, Manuela y Olmo se vuelven a reencontrar en el luminoso barrio de las Vistillas, en esta ciudad que se vuelve tan tenue y borrosamente bella en invierno, de la que, probablemente, ya nunca me iré.
Van parándose en uno y otro sitio, como hicieron entonces, puede incluso que repitiendo escenarios, persiguiendo una íntima nostalgia.
Esta primera mitad de la película trata sobre la eterna resaca del primer amor correspondido. De ese extásis inconsciente que es la mejor droga que uno probará, pero que por desgracia es también de una abstinencia persistente.
En un momento posterior, noto que me empieza a faltar el mismo aire que a Manuela al cantar al piano en el bar de su padre, y una profunda melancolía me sube por el cuerpo hasta emocionarme, porque en esa feliz noche que ambos comparten también he estado yo contigo, en la barra de un bar, en un local de jazz, en la boca de metro.
La escena del Fernet con Coca-Cola es también tan real que las confidencias de sus protagonistas me asaltan y ahora, como ellos, me pregunto (con el cinismo característico del fracaso), si de verdad el mejor momento de esta vida cualquiera se quedó atrás contigo; si la espuma de aquellos días terminará algún día de secarse.
Siempre he dudado que historias tan profundas sobre nuestra condición no sean de alguna forma autobiográficas. Como Robin Williams cuenta a Matt Damon en ese icónico banco de Public Garden: algunas cosas sólo pueden vivirse.
Pero aquí la línea es finísima y es muy difícil separar realidad de ficción, el director del actor, el guión del diario:
Después de media vida separados, Manuela y Olmo se vuelven a reencontrar en el luminoso barrio de las Vistillas, en esta ciudad que se vuelve tan tenue y borrosamente bella en invierno, de la que, probablemente, ya nunca me iré.
Van parándose en uno y otro sitio, como hicieron entonces, puede incluso que repitiendo escenarios, persiguiendo una íntima nostalgia.
Esta primera mitad de la película trata sobre la eterna resaca del primer amor correspondido. De ese extásis inconsciente que es la mejor droga que uno probará, pero que por desgracia es también de una abstinencia persistente.
En un momento posterior, noto que me empieza a faltar el mismo aire que a Manuela al cantar al piano en el bar de su padre, y una profunda melancolía me sube por el cuerpo hasta emocionarme, porque en esa feliz noche que ambos comparten también he estado yo contigo, en la barra de un bar, en un local de jazz, en la boca de metro.
La escena del Fernet con Coca-Cola es también tan real que las confidencias de sus protagonistas me asaltan y ahora, como ellos, me pregunto (con el cinismo característico del fracaso), si de verdad el mejor momento de esta vida cualquiera se quedó atrás contigo; si la espuma de aquellos días terminará algún día de secarse.
Más sobre fulanqi
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here