A pesar de ser tan antigua, Grease es uno de los clásicos musicales del cine. Todo en ella la convierte en una película sublime. La historia de amor entre la niña buena de papá y el malote que no estudia, canciones pegadizas que, después de tantos años, siguen siendo éxitos y el baile del aspersor que marcó a toda una generación. A mí que siempre me han gustado los musicales, este me parece uno de los mejores que he visto en mi vida. Desde luego John Travolta clava su papel totalmente.

A pesar de durar 133 minutos, esta película es un gran ejemplo de cómo una mujer con fuerza, valor y ayuda de un buen amigo, ama y cuida la naturaleza que es destruida por otros que solo piensan en su beneficio propio. Encontramos como protagonista a un chico que busca deshacerse de una maldición y a una chica cuyo hogar es el bosque con los lobos. Como antagonistas encontramos a una mujer que está destruyendo el bosque con su minería y un hombre que tratará de sacar beneficios sin importar el coste. Aún así, en ambas se ve un ejemplo de empoderamiento femenino donde se enfrentarán ambas por sus intereses. Los dibujos que nos presentan son hermosos con pequeños toques que dan un aura de paz al bosque de la película

El viaje de chihiro es un verdadero logro en el arte de la animación. Se puede ver cómo lo han hecho con mucho cuidado y profesionalidad. Al principio lo que más te puede llamar la atención son la cantidad de personificaciones que encontramos en distintos animales trabajando en un local de baño. En cambio si la vemos más veces nos podremos dar cuenta de que tiene un trasfondo donde nos enseña de manera indirecta que aún siendo una niña, el trabajo duro y el esfuerzo siempre dan sus frutos.

Forrest Gump es un clásico de los 90 pero a día de hoy es un clásico del cine. Es una película preciosa donde Tom Hanks hace un papelazo al representar a un hombre con discapacidad que no puede andar y poco a poco superará sus problemas. En un entorno que tampoco le ayuda a ello, conseguirá sobresalir por encima de todos y demostrar que con constancia y, sobre todo, ganas se sale de todo.
Cuando te propones algo de verdad, está claro que lo conseguirás y no hay ejemplo más emotivo y realista que el de esta película.
Finalmente podemos ver cómo a pesar de sus discapacidades y rarezas podrá incluso llegar a criar él a su propio hijo sin que se opongan por su situación.
La escenografía es antigua pero muy lograda y unos paisajes muy bonitos.

Makoto Shinkai se ha lucido con esta película. A pesar de su extensa duración merece la pena totalmente verla. Te integra en un mundo donde dos jóvenes tienen una conexión al dormirse y se intercambian los cuerpos. Así, tal y como suena, se puede pensar que ya hay muchas películas de esto pero desde luego está merece la pena totalmente. Poco a poco estos dos jóvenes se van enamorando el uno del otro y el final de la película te dejará sin palabras. Simplemente, es preciosa, si has venido buscando una crítica para verla o no, deja de dudar porque la respuesta es que sí rotundamente.