Mi primer acercamiento al cine mudo fue con esta maravillosa película del gran Chaplin. Y cómo disfrute con ella. He reido, he llorado, he sentido y he vibrado con esta magnífica película que merece estar entre las mejores. La señorita Cherrill hace un papel delicioso, y el duo del ricachón y el entrañable Charlot aportan algunos momentos memorables. El uso de la música es exquisito, acompañando a la perfección cada escena.
Se la recomiendo a todo el mundo, porque es una auténtica joya que derrocha humor y ternura, con uno de los mejores finales que puedo recordar: "Ahora te veo".

La vida de Ian Curtis fue un devaneo entre la enfermedad y sus propios fantasmas. No llegué a conocer a Joy Division porque Curtis falleció unos meses antes de mi nacimiento, pero su música es impactante, y mucho de eso se lo deben a este atormentado genio con voz profunda y una puesta en escena más que curiosa.

La película es un biopic de su vida en la que poco se omite: su vida familiar, su pronta paternidad, el éxito, la infidelidad, la enfermedad, la depresión, la frustración de un trabajo poco estimulante... Lo más destacable de la película es sin duda su cuidada fotografía, pero no podía ser menos viniendo de Anton Corbijn. La experiencia de recorrer las mismas calles, los mismos lugares en los que se desarrolló la historia real, con la acertada elección del blanco y negro te sitúan casi como si fueses un personaje más. Sam Riley, además de parecerse muchísimo a Curtis físicamente hace un trabajo impecable, hasta el punto en el que es como si realmente estuvieses viendo al Curtis real, te traspasa totalmente, no se excede en las escenas de ataques epilépticos y es capaz de proyectar la angustia y confusión del personaje. Samantha Morton también tiene una actuación más que aceptable.

Lo que más me gustó de la película es el momento en que suena Atmosphere y la canción cobra todo su significado. Aunque ya sabes cómo va a terminar todo te sobrecoge y ahí es donde está la magia del cine.

El rey león es una de esas maravillas que jamás te cansas de ver por mucho que crezcas. Basada en la historia de Hamlet, un rey que es asesinado por su hermano y un hijo que busca venganza, aunque en el rey león Simba desconoce este hecho hasta prácticamente el final, lo que le da un valor más bien de revancha al de venganza.
Las escenas de animación son maravillosas, recreando la sabana africana y la jungla donde viven los inolvidables timón y pumba, lo tétrico que resulta el cementerio de elefantes o la guarida de las hienas. La espectacularidad de la escena de la estampida aún me sigue sobrecogiendo. Es todo un espectáculo de colores que se va grabando en la retina del espectador de forma colosal.
Si añadimos a esto una música maravillosa y unas canciones que se nos quedan grabadas prácticamente desde el primer momento, podemos decir que es una de las películas con mejor ambientación del género de animación.
Todos los personajes están cuidados con el máximo detalle y tienen una personalidad muy marcada, desde el mayordomo Zazú y su querer cumplir siempre con su obligación y Nala con su sentido del deber y la responsabilidad hasta Timón y Pumba, dos tipos despreocupados que han sufrido la marginación y han decidido seguir con su vida "a su manera". Esta filosofía del Hakuna Matata en contraposición a la obligación y el deber son uno de los mensajes más importantes de la película. Simba deberá decidir entre lo que es más fácil o lo que es correcto.
Por otro lado nos encontramos también con un sobervio villano, un genial Scar que deja a muchos de los grandes villanos del cine a la altura del betún, y sus secuaces, unas hienas más bien tontonas pero que al final se demuestra que no tanto como parecen.
Toda la película es un disfrute para los sentidos, con un guión lleno de mensajes y enseñanzas sobre la vida.

LO MEJOR: la música, la historia, los personajes, LA PRECIOSA ESCENA INICIAL
LO PEOR: Segundas partes nunca fueron buenas.

Cuando me senté a ver esta película esperaba posicionarme respecto a ella, o bien como obra maestra o bien como bodrio infumable. Sin embargo me ha dejado totalmente indiferente.

Lo mismo vemos unas imágenes de una belleza sublime, que otras de un mal gusto impresionante. Y todo esto lo agitas y sale Anticristo. Le reconozco una estética impecable y una fotografía de gran calidad, además de que los actores hacen un trabajo más que notable. Pero ahí queda todo.

LO MEJOR: la fotografía y las actuaciones de Dafoe y Gainsbourg
LO PEOR: Que no hay historia ni desarrollo coherente. Reina el caos.

Moliere dijo en una de sus obras: "Así va el mundo. Muchos adquieren opinión de doctos, no por lo que efectivamente saben, sino por el concepto que forma de ellos la ignorancia de los demás."
Y esto me pasa a mí con esta película, que veo un sinfín de sabelotodos que dicen que es maravillosa y que los que no la entienden no saben de cine o no les gustan las películas que les hacen pensar. Sinceramente, yo pienso que no está desarrollada de forma asequible al espectador, sino como una alegoría de imágenes, que en ocasiones te hacen desconectar o te aburren soberanamente, pero no te da pistas de por donde seguir la trama de lo que pretende contar.
Y es que cuando hay que buscar explicaciones o leerse un libro para entender una película es porque algo está fallando, y por mucho que se empeñen los entendidos, no siempre se debe a la ignorancia del espectador.
La película cuenta con una ambientación magnífica, unos efectos especiales impresionantes y una banda sonora que incluye temas de música clásica deliciosos. Pero se hace excesivamente lenta, se detiene minutos en mostrar una nave espacial o en mostrarnos como funcionan los zapatos anti-gravedad, se pierde en sus propias imágenes hasta que ya dejan de sorprender para aburrirnos soberanamente, y hay partes en que la música se hace tediosa hasta incomodar.
Al tercer intento conseguí terminar de verla pero me dejó un sabor muy agridulce.