Lo dicho: tenemos los mejores ingredientes posibles del terror gótico clásico, de Edgar Allan Poe, de Arthur Machen (mencionado en la obra) de H.P Lovecraft y de todos los autores que desarrollaron la mitología precristiana occidental, repleta de todo tipo de historias y de criaturas, tales como hadas, gnomos, duendes, magos etc.

¿Qué ingredientes son esos? Pues bien, para empezar una escenografía fantástica, una mansión victoriana situada en Providence, Nueva Inglaterra (EEUU, lugar de residencia además de H.P Lovecraft) restaurada que parece estar exactamente como a mediados del siglo XIX. Biblioteca antigua, majestuosa escalera, ventanales y lo más importante: un sótano que contiene un almacén de ceniza tan profundo y oscuro que nadie quiere acercarse a él...

Tenemos un jardín antiguo con un curioso círculo de setas, árboles decrépitos y un pequeño estanque con peces. Tenemos también una niña proveniente de una familia desestructurada, una niña que como todos los niños cree en lo sobrenatural y es más impresionable que un adulto.

Parecía que la receta era perfecta, pero es lo que ocurre cuando Del Toro es productor y no director y cuando nos basamos demasiado en una versión antigua que a juzgar por lo que he visto de ella no vale nada. A mi modo de ver, Del Toro debería haber tomado las riendas del proyecto y darle otro enfoque, mucho más terrorífico, con una banda sonora decente y sin mostrar tanto (¡bueno si es que se pasan!) la "amenaza" en pantalla. Así habría sido un peliculón, pero se ha quedado en un triste 6 por todo lo ya comentado y lo que especificaré en el spoiler: