Una plaga de origen desconocido, supervientes y zombies. Todo eso son los ingredientes de la tercera cinta que veo de Zack Sneyder (300, Watchmen), una cinta remake del clásico de terror de George A Romero, con muchas cosas que destacar (la sensación bien realizada de soledad, las escenas de acción y tensión) y otras que no destacan (malas actuaciones).

Lo que nos ofrece el film es una historia de supervivencia, de un grupo de supervivientes buscan la forma de salir de ese sitio lleno de monstruos antropófagos. Es una historia típica de zombies. Pero ofrece buenas escenas llenas de tensión, un ritmo narrativo rápido (se pasa en un plispas) y mucho entretenimiento con las continuas escenas de acción. Pero con un final previsible y algunas escenas resultan cansinas y pesadas.

Las actuaciones son malas, ningún actor /actriz muestra carisma, ni el estado de desesperación, ansiedad o horro que supone estar solos en una tierra plagada de esos zombies caníbales. Ninguno se salva todos parecen fríos y sin nada que trasmitir al público que este viendo la película.
En resumen, un buen film del subgénero de terror zombie muy entretenida. Donde se habrá zombies, se derramara mucha sangre y quedara incrustada alguna bala en el cráneo de esos caníbales andantes.