Haz click aquí para copiar la URL
Argentina Argentina · Buenos Aires
Voto de Juan Rúas:
7
Drama Dos hermanos a los que separó una tragedia familiar, cuando eran niños, siguen sufriendo hoy las secuelas y los traumas de una infancia triste y oscura: la vida de Nick gira en torno al alcohol y a la violencia; su hermano pequeño es padre soltero y se esfuerza todo lo posible para proporcionarle a su hijo una vida mejor. (FILMAFFINITY)
28 de marzo de 2011
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
No se le puede achacar nada, o casi nada. Si condenamos a Vinterberg será por su truculencia solapada, por su nihilismo festejado, pero no por su trabajo a la hora de afrontar sus criaturas. Porque cada una de sus pelis son retratos viscerales de seres suburbiales, seres de las profundidades que aún llevando todas sus miserias sobre la espalda todavía se dan el lujo de mirar a la cámara con dignidad.

Dos historias que parecen una sola: varían las peripecias argumentales pero el desenlace y el motor son los mismos. Es cierto que le gusta el tremendismo, pero si podemos realzar los dotes de una peli festiva e inocente debemos rendirnos ante la misma lógica dentro de una obra que no se guarda la crueldad a secas. No hay moralina, ni verborragea redentoria; hay actos, eso sí, revestidos de un honor que roza lo...honorable, por más que suene redundante.
Un amigo desequilibrado y fiel; un padre desequilibrado y fiel...¿quién puede acercarse y decirle que es mal padre? ¿Quién puede sumergir el puño dolorido de ese tipazo que no para de confrontar a la vida como si fuera Jesús de Nazareth?

Con sus males a cuestas, con cruces invertidas hasta en el trasero, todavía llevan consigo el don de la buena gente. Podrá ser tremendista, pero esto es Submarino, y en las profundidades resulta humana, demasiado humana.
Juan Rúas
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow