Película que rinde homenaje al cine detectivesco, ademas de representar que un gran cast combinado con un guion interesante desde el primer minuto es una formula infalible para el éxito en pantalla.

El trabajo del señor Rian Johnson es impecable, puede notarse el dominio del proyecto desde el primer segundo de la película, esto se logra pospuesto a que la silla de director y escritor la ocupa este mismo, logra imprimir en sus 130 minutos un historia tan compleja y basta como una película del genero detectivesco tiene la obligación de serlo, todo esto sin hacerte perder a ti como espectador el hilo de la misma, que aun que al principio sera un ritmo poco acelerado y cargado de información la película te permitirá familiarizarte antes que te des cuenta, no
comas ansias.

El reparto actoral es increíble, las actuaciones de cada uno de los presentes en pantalla es impecable, cada uno de los roles es representado de manera perfecta y lo bien escrito del guion permite que brillen y nutran la historia con cada segundo.

El guion, es complicado, es entreverado, es complejo a un nivel muy pocas veces visto en producciones tan grandes, pero no por esto menos interesante, es brillante y sabe contar una historia de manera apasionante, me pareció sumamente admirable como es que permite que desde nuestro asiento podamos participar en el desarrollo de la historia, que te envuelva a utilizar tu criterio y te permita formar parte de la trama y a generar tus propias conclusiones, este aspecto puede ser arma de dos filos, puesto que considero que para disfrutar realmente de esta joya y admirar su complejidad te exigirá mucha atención, así es que si buscas algo solo para divertirte y relajarte, esta película no es para ti.

Una historia apasionante y llena de detalles increíbles, vale cada maldito segundo de atención, espero con ansias la secuela.