Haz click aquí para copiar la URL
Voto de John Dunbar:
10
Acción. Thriller El legendario asesino John Wick (Keanu Reeves) se ve obligado a salir del retiro por un exasociado que planea obtener el control de un misterioso grupo internacional de asesinos. Obligado a ayudarlo por un juramento de sangre, John emprende un viaje a Roma lleno de adrenalina estremecedora para pelear contra los asesinos más peligrosos del mundo. (FILMAFFINITY)
7 de mayo de 2020
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Y no se aleja mucho de una realidad física tras llevar parte del rodaje a Roma y sus catacumbas. Aunque lo que evidencia más esa metáfora, y a fin de cuentas lo que más interesa, es el trance por el que el personaje pasa. En su carta de presentación a Wick lo conocimos como una máquina de matar perfecta, un asesino a sueldo retirado atrapado por su pasado, que se diría en recuerdo a De Palma, quien después de sufrir la pérdida de su mujer tiene un altercado, posteriormente determinante, que le traerá de vuelta a lo mejor que sabe hacer. La venganza será su compañero de viaje.
En la secuela la tentación por el mal camino vendrá de frente, pero con idéntico resultado. La intro, ajena a lo que llegará, ya es un paradigma salvaje de lo que significa John Wick. Esa alusión al pacto de sangre, será la causa de todos sus lamentos. Un pagaré ineludible que quiere (exige) saldar sus deudas y utilizar, nunca mejor dicho, al asesino perfecto para sus oscuros intereses. De vuelta al ayer John Wick, a tu pesar.

Probablemente no haya relación directa entre Derek Kolstad (creador del personaje y guionista) y el cine de acción tan expresivo en lo gráfico venido de oriente hace décadas ya, con ilustres en la materia como Kitano o Woo. La cuestión es que tiene una semejanza, sea voluntaria o involuntaria, pero sea bienvenida. De hecho, en cuestiones argumentales hay más perversidad concentrada en el mundo lúgubre en el que reside el personaje que encarna Reeves, para quien hay, por cierto, un momento déjà vu con su viejo amigo de viejas batallas virtuales Laurence Fishburne encarnando a 'Bowery King', un outsider dentro de ese peculiar submundo, asesino ayer, cabeza pensante hoy, que hará las delicias de más de un nostálgico. Qué cosmos más complejo y diabólico (fuera de esa visión de mundos paralelos y esclavismos virtuales con que nos amenizaba la trilogía 'Matrix') nos ofrece, cuando lo convierte en una sociedad llena de mercenarios asesinos bajo la apariencia de gente normal. Ese mismo en el que imagina un hotel llamado Continental, revestido de la misma apariencia natural, capaz de albergar en su seno una especie de club exclusivo para esos mismos criminales, cobijo para el pacto de no agresión al que atenerse por parte de sus miembros, algo así como la Suiza necesaria en el mundo de asalariados del gatillo al mejor postor.
Ya no hay factor sorpresa pero lo que importa es que sigue respetando los mismos códigos de honor que la habían llevado a serlo. Después de 'Otro día para matar' había logrado sorprenderme y más aún, encandilarme. Después de 'Pacto de sangre' me ha convencido de que John Wick quedará para la posteridad como personaje de culto irreprochable y referencia en su género.
John Dunbar
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow