Leyendo los comentarios de críticos y espectadores me esperaba un plomizo tostón. La he ido a ver con esa predisposición, pero lo que he visto es una película espectacular, soberbia, de novedosa e interesante temática, pausada pero entretenida de principio a fín. Su ambientación, escenografía y tomas son un auténtico espectáculo para la vista. Una brutal crítica al fundamentalismo religioso, sea cual sea la religión. Una perfecta recreación del complejo ambiente multireligioso que marcó el fin de la Antiguedad.
Se nota la maestría en la dirección y el gusto por cuidar hasta el más mínimo de los detalles. Cine para admirar y quedar para la posteridad, a la altura de las mejores producciones históricas, que además nos hace reflexionar sobre la intolerancia del hombre
A todo aquel que ame el cine, la Historia y la Verdad, le encantará. Eso sí, no espereis una película de acción con muchas peleas, tíos buenorros y musculados vestidos de gladiadores y abundantes efectos especiales.

Mi consejo: no os fieis demasiado de los/as críticos/as. Películas muy mediocres e incluso malas obtienen altas puntuaciones con criterios dudosos, sólo por ser norteamericanas y de autor, pero luego se exige demasiado a directores españoles como Amenábar, que ha demostrado sobradamente que es uno de los grandes. No hay objetividad. O quizás hay todavía demasiada influencia de sectores católicos entre las críticas, todo hay que decirlo, porque la película es polémica por contar la verdad.