Supongo que a todos y todas los que hemos pasado por tratamiento psiquiátrico, bipolares y en muchos casos, con problemas que ha desencadenado el amor, esta película se nos hace como ver un resumen de parte de nuestras vidas, en principios casi me había atrevido a compararla con la genial Garden State, pero no creo que sea fácil superar a Portman en ningún aspecto, aunque se merece una buena puntuación; es innegable que estamos ante una base narrativa estándar, con un final estándar que entiendo pueda que decepcione a muchos y muchas que devoran con avidez la tragedia de los últimos minutos, nunca lo he entendido muy bien, sí, es cierto que algunos clichés resultan manidos y previsibles cuando se utilizan, pero ¿No es acaso la vida suficientemente trágica para perseguir esa tragedia también en la ficción?...en fin solo es filosofía barata y prefiero no entrar en análisis psicológicos pues seguramente yo sería el primer analizado. De Silver Linings Playbook yo me quedaría con una sola enseñanza, aparte del bien hacer para mi de Bradley y Jennifer y, desde luego de De Niro. Una enseñanza que no suele verse en las películas de amor o románticas, por muy loco que te deje una relación, por muy confuso, por muy asustado, siempre habrá quien cure tus heridas curando a su vez también las suyas; los humanos podemos considerarnos animales terapéuticos, en la dosis necesaria nos salvamos salvando y el resultado pude que supere al sueño mas hermoso que nuestro corazón roto había imaginado en sus delirios de enfermo terminal. Eso si, a quien pretenda ver una comedia romántica, mejor quédese en casa