Típica película de Naomí Watts, o sea: un thriller con bastante tensión, bien llevada y bien realizada. No le pidamos películas candidatas al Oscar o cosas por el estilo, Naomí Watts es una especie de Liam Nesson en versión femenina, con películas que nos van a hacer pasar un buen rato y no arrepentirnos de haberla puesto. Ésta cinta tiene la particularidad de mostrarnos de manera muy convincente lo importante que se han vuelto los smartphones para nuestras vidas, como ese aparatito que llevamos en el bolsillo, sabiéndolo usar, es practicamente como una C.I.A., una Agencia de Inteligencia personal y en miniatura.