Haz click aquí para copiar la URL
España España · Zaragoza
Voto de karwai:
1
Drama El filme está compuesto de tres partes, respectivamente tituladas: Reino 1. Infierno; Reino 2: Purgatorio y Reino 3: Paraíso. El infierno, de una duración aproximada de siete u ocho minutos, se compone de distintas imágenes de guerra, sin orden cronológico o histórico. Aviones, tanques, buques de guerra, explosiones, fusilamientos, ejecuciones, poblaciones en fuga, campos devastados, ciudades destruidas, etc. Todo tanto en blanco y ... [+]
23 de marzo de 2008
11 de 27 usuarios han encontrado esta crítica útil
Así se siente uno. Le han pisoteado e insultado en su inteligencia tras su visión.

El “Babas”, afable y legendario personaje de mi juventud, tenía la graciosa costumbre de decir, día sí y día también, que le habían insultado “gravísimamente”. Bien, traigo esto a colación pues son esas mismas palabras –huelga decir que con la misma entonación- las que me vienen a la mente tras el visionado de “Notre Musique”.

Por estos lares, hubo un tiempo en que la cultura tuvo una cierta importancia y, junto a exposiciones importantes, había otros acontecimientos tales como el Concurso de piano Pilar Bayona o el festival de cine “Cinefrancia”. Eran momentos de dicha, pues por fin llegaban a la ciudad películas frescas y en versión original. Una de esas películas fue “Notre Musique”.

Mi amigo JRC asistió a la cita con ciertas dudas y reservas. Aún resuenan en mi cabeza los cariñosos apelativos que propició a Godard por su Elogio de Amor, tras viaje ex profeso a Logroño para contemplar la última enseñanza del maestro.

Eché un vistazo a la sala. A reventar. La edad media no superaría los 20 años. Esto ya era sospechoso, pues ¿dónde estaba toda esa legendaria masa de fieles del Mesías cinematográfico?.

Comenzó la película. Ya sabéis, Infierno, Purgatorio y Paraíso. Ya sabéis, todo muy intelectual, duro, apocalíptico, sarcástico… Que sí, que sí. Menudo tostón. Qué modo tan burdo e insufrible de exponerlo. Y encima irritante, porque observar al propio Godard, cual ser superior, dándote una lección de moralidad y ética es, cuando menos, sangrante. Menos mal, que Juan Goytisolo nos da el toque de levedad necesario para poder respirar ante semejante opresión intelectual. Se agradecen los toques de humor que el reputado periodista y escritor aporta, con una naturalidad que no ostenta ninguno de los demás rostros que aparecen a lo largo del metraje.

Acabó la obra y se encienden las luces. Rostros circunspectos y con leves sonrisas. Todos quieren decir : qué lucidez, qué lección de honradez y compromiso. No es posible, me digo. Me di la vuelta y ahí estaban cinco quinceañeras. Un par, siguiendo la línea oficial, dijeron “ha estado muy bien”. Otras dos hicieron mutis y por fin la quinta, cómo si le hubieran estafado, espetó en una muy audible voz: ¡Menuda mierda!.

Por fin sonreí y me di cuenta que todo estaba en su sitio. Una tierna y cándida mente no condicionada por críticos o por la trayectoria de un cineasta expresó su opinión del modo más sincero posible. La mía, al estar condicionada, ya no es tan pura y por eso digo que me parece uno de los espectáculos más execrables y lamentables que he visto en un cine. Cómo alguien que hizo las maravillosas “Al final de la escapada” o “Pierrot el loco” ha acabado haciendo esto, nos hace perder toda esperanza en su futura trayectoria. Al menos, que no nos haga como a “El Babas” y no nos insulte gravísimamente.
karwai
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow