Haz click aquí para copiar la URL
España España · a coruña
Voto de Esmiz:
5
Ciencia ficción. Acción En un futuro no muy lejano el boxeo es robótico: en los combates ya no se enfrentan seres humanos, sino robots humanoides, sofisticadas máquinas diseñadas para luchar. Charlie Kenton, un antiguo púgil que casi llegó a alcanzar la gloria, está pasando una mala racha como promotor de combates. Un día, encuentra un viejo robot desechado y, al comprobar que es un gran boxeador, decide entrenarlo. (FILMAFFINITY)
15 de marzo de 2012
Sé el primero en valorar esta crítica
Acero Puro podría pasar como otra chorradilla más que justifique con taquilla una inversión millonaria más o menos grande. No obstante y para la ocasión la película guarda ciertos atractivos y también ciertos desencantos.

En la parte buena encontramos a un Hugh Jackman que sabe darle cuerpo a su personaje y carga con el peso de la función con decencia, el resto del elenco a figurar, con una guapa Evangeline Lilly y un Kevin Durand garrulote y gañán que cae hasta simpático.
Pero donde la película descolla es con sus otros actores, los robots luchadores no merecen otro calificativo que sobresaliente con una interacción con los humanos realmente sorprendente y un nivel técnico muy alto, Zeus incluso da canguelo por el realismo de su maldad humana enchufada en su carcasa de metal. También se debe reseñar el buen tono narrativo y el ritmo entretenido que el señor Levy otorga a su cinta.

Pero, aquí viene mi parte favorita, el discurso que suelta reflejado en la juventud americana a través de un niño bastante repelente. Tanto cuesta encontrar a un buen Haley Joel Osment o un Joseph Mazzello. roza en ocasiones lo esperpentico y es cuando menos muy forzado, una especie de aun podemos ser los mejores un par de décadas más con el que no se engañan ni así mismos, para colmo los malvados son europeos y asiáticos y dominan con tiranía un deporte tan nacional que un niño tiene que darles una lección con su rudo aunque entrañable robot americano... Es que ya no se puede enfadar uno porque hasta causa gracia, que no risa.

En fin, un trabajo del señor Levy aceptable por lo técnico y que cuando a querido hacer una película adulta o cuando menos post adolescente, una extraña sensiblería repelente y un patriotismo de anuncio Marlboro no le han dejado.
Esmiz
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow