Añadir a mi grupo de amigos/usuarios favoritos
Puedes añadirle por nombre de usuario o por email (si él/ella ha accedido a ser encontrado por correo)
También puedes añadir usuarios favoritos desde su perfil o desde sus críticas
Nombre de grupo
Crear nuevo grupo
Crear nuevo grupo
Modificar información del grupo
Aviso
Aviso
Aviso
Aviso
El siguiente(s) usuario(s):
Group actions
You must be a loged user to know your affinity with SEDUCIDOS
- Recomendaciones
- Estadísticas
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de SEDUCIDOS:
8
Voto de SEDUCIDOS:
8
7.5
26,722
Thriller. Drama
El joven Malik El Djebena (Tahar Rahim), un francés de origen árabe, ingresa en prisión para cumplir una pena de seis años. Aunque al principio la vida en la cárcel le resulta muy dura porque está completamente solo, se adapta rápidamente y, gracias a su carisma, se gana poco a poco la simpatía de los miembros de la mafia corsa, que tienen sobornados a los guardias y controlan todo lo que pasa en prisión.
17 de enero de 2010
17 de enero de 2010
7 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
En El efecto Lucifer, un interesantísimo y revelador libro escrito por el Dr. Zimbardo, se expone una tesis según la cual -y en base a estudios, experimentos y acontecimientos cotidianos- las personas (normales) que se encuentran sometidas a vivir en un ambiente hostil, terminan por desarrollar conductas inhumnas. Grosso modo. Pues bien, si las personas normales podemos llegar a cometer actos atroces contra el prójimo en condiciones extraordinariamente adversas, no es difícil imaginar las atrocidades que pueden cometer los delincuentes contra otros semejantes.
Jacques Audiard, nos presenta el relato de un joven criminal que ingresa por primera vez en una prisión para adultos, tras haber pasado por varios correccionales para cumplir una condena de seis años (por motivos que no se explicitan en el filme). El director parece compartir la tesis de Zimbardo, que extrapolada a la conducta de un criminal en una prisión, nos muestra no sólo la imposibilidad de rehabilitar a un delincuente, sino su progresiva degeneración. Malik, el joven protagonista de la película, sufrirá los horrores de la privación de libertad en una carcel de París donde tendrá que cometer autenticas brutalidades primero para sobrevivir, y luego para ascender posiciones.
La película, realizada con un estilo hiperrrealista digno del mejor Ken Loach, no tiene apenas concesiones a los buenos sentimientos. Es un retrato sórdido y nada complaciente de la maldad como modo de vida, de la degradación moral de un individuo, que ni puede ni quiere reinsentarse en una sociedad a la que dejó de pertenecer hace ya mucho tiempo.
El general Patton dijo que el castigo no es para bien del pecador, sino para la salvación de sus camaradas. Cuánta razón tenía.
Jacques Audiard, nos presenta el relato de un joven criminal que ingresa por primera vez en una prisión para adultos, tras haber pasado por varios correccionales para cumplir una condena de seis años (por motivos que no se explicitan en el filme). El director parece compartir la tesis de Zimbardo, que extrapolada a la conducta de un criminal en una prisión, nos muestra no sólo la imposibilidad de rehabilitar a un delincuente, sino su progresiva degeneración. Malik, el joven protagonista de la película, sufrirá los horrores de la privación de libertad en una carcel de París donde tendrá que cometer autenticas brutalidades primero para sobrevivir, y luego para ascender posiciones.
La película, realizada con un estilo hiperrrealista digno del mejor Ken Loach, no tiene apenas concesiones a los buenos sentimientos. Es un retrato sórdido y nada complaciente de la maldad como modo de vida, de la degradación moral de un individuo, que ni puede ni quiere reinsentarse en una sociedad a la que dejó de pertenecer hace ya mucho tiempo.
El general Patton dijo que el castigo no es para bien del pecador, sino para la salvación de sus camaradas. Cuánta razón tenía.