Si pasamos por alto que es una adaptación de la mucho mejor novela de Wilkie Collins y la vemos como se presenta, es un buen culebrón, cuyos fallos se deben en parte a que tiene que resumir la trama mucho más fina de la novela en una película de poco más de hora y media.
La trama, contada así, es algo rocambolesca y primaria, pero por lo menos entretiene, porque están continuamente pasando cosas Jared Leto, Basil, es un poco soso; pero el personaje que interpreta Christian Slater atrae, por su doblez y simpatía a la vez. Claire Forlani consigue da un toque de fantasía y de tragedia y el padre del muchacho atolondrado es un convincente Derek Jacobi. Rachel Pickup logra dar idea de la Clara de la novela, la que siempre está ahí, espera y ama.
Y la ambientación es fastuosa, tanto cuando describe lo rico como lo pobre. Una gran escenografía.
De todos modos, si no se quiere ver esta película, léase la novela. Wilkie Collins no defrauda.