Qué pena de película que lo tiene todo para estar bien (historia mafiosa basada en hechos reales, buena ambientación años 70, reparto coral interesante, buena banda sonora y efectos especiales en los atentados, etc.) pero no acaba de funcionar.

Creo que la película le ha venido grande al director Jonathan Hensleigh porque el material que tenía entre manos era suficiente como para hacer algo bastante mejor. No digo que tenga que ser un Scorsese y hacer algo como Uno De Los Nuestros o Casino pero la película la ves y piensas todo el rato que va a mejorar o que va a dejarte algo para el recuerdo, pero te quedas con las ganas. Al final sólo hay personajes sin parar que se eliminan entre ellos y una historia mal hilvanada.

Decepcionante, y mención especial hay que hacer al pobre de Val Kilmer, que quitando el paréntesis de Heat, parece que no ha vuelto a hacer nada decente desde que Oliver Stone le caracterizón como Jim Morrison... Ay McMardigan que mal te veo!!!