Si tu película está nominada a la entrega de premios más prestigiosos de la industria cinematográfica es ya una gran satisfacción, y aparte si te ganaste la nominación con un duro trabajo de equipo, y un presupuesto sumamente limitado, la satisfacción es mayor no solo para el director sino para todos desde el equipo de fotografía hasta para los actores todos comparten el éxito y eso está muy bien, ahora por supuesto y es lo más natural tu película habrá a quienes no les guste y existirán aquellos que sí les guste, algo totalmente natural porque la entrega de premios siempre es subjetiva y bueno como seres humanos pensamos distinto, lo importante es que la audiencia puede elegir de qué lado esta, yo particularmente me incluyo en los de la segunda opción, a mi “Nebraska” me gustó, y me pareció una película sumamente correcta y honesta, el director lleva la obra con mucha honestidad y con un profundo sentimiento de respeto hacia las relaciones humanas o más bien al día a día, nuestra cotidianidad reflejada en la pantalla grande contada de una manera romántica que puede conectarse con el espectador y lograr crear un vínculo porque nosotros, la audiencia, nos sentimos identificados con lo que vemos y escuchamos de la pantalla, y esa es la gran virtud de la película y el inmenso logro de Payne porque logro transformar la cotidianidad en algo sumamente simpático. Me resulta irónico que los mejores comediantes, somos nosotros mismos, porque nosotros nos reímos siempre de nuestra rutina, y siempre nos reiremos de nuestro normal día a día, somos los mejores comediantes y los artífices de grandes maravillas y “Nebraska” refleja todo eso, por eso es que tanto me gusta y esa es su gran virtud es el regalo de Payne para nosotros. El trabajo fotográfico es una maravilla, dota a la película de un realismo muy natural, envidiable la puesta en escena, junto con los actores es el punto y la calificación más alta de todo el equipo.

"Nebraska" es una gran película porque todo un planteamiento de vida sumamente complejo es capaz de reducirlo a su expresión más simplificable, lo difícil lo convierte en fácil, y soy partidario de que en la simpleza está en la grandeza, como en un juego de futbol el que juega simple, juega bien y así en todo lo que hacemos y el cine no es la excepción, apoyados en un relato suave a blanco y negro junto a un par de actores que como equipo logran una altísima performance (sobre todo Dern) que llevados al límite de sus situaciones logran su máximo rendimiento para dotar a la película de un realismo tan gélido como natural; gran retribución de su trabajo estar nominados al Oscar. Película recomendable sencilla, divertida, simpática y otorga ese aire fresco que siempre necesitamos.