Típica serie que no cuenta nada pero te quieren hacer entender que lo cuentan todo y con mucha originalidad. ¿digo originalidad? Ninguna, ni el argumento, ni el guion, ni la fotografía y mucho menos los actores. Mal si las ves doblada y peor en versión original.

Pero ¡cómo no va a ser buena una serie sobre neoyorkinos, por favor! ¡Si son lo más del mundo mundial! Los de esta serie lo que más son es aburridos, tanto, que en las orgías que se corren no se deben de correr mucho porque acaban vestidos, maquillados y peinados como antes de empezar.

Malos los protagonistas, la actriz es de expresión única, única porque solo tiene una, no porque sea maravillosa ni exclusiva. Su coprotagonista, peor, y ya era difícil. Los secundarios, sobrantes.


Lo más triste es que pretende ser subversiva, y a lo más que llega es a mostrar a uno que sale con un consolador en el culo y la actriz que solo sabe decir tacos y drogarse con lo que sea ... pues vale. ¡Qué guay!

Lo único bueno es la música con la que ella resucita en el baño, pero ¡oh qué curioso! Tampoco es original, la baila el doctor House en la serie del mismo nombre cuando la doctora Cuddy es operada y lo ve en sueños. Vaya ...