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Voto de Rome:
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Comedia. Drama
Santiago después de levantarse baja a la cocina, donde lo espera toda la familia para felicitarlo: es su cumpleaños. Todos le cantan el "Feliz cumpleaños", y él empieza a abrir los regalos; cuando le toca el turno al de su hijo pequeño, se enfada y dice que no le gusta. (FILMAFFINITY)
17 de enero de 2023
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Película de comedia dramática española estrenada en 1997 que fue la ópera prima del laureado Fernando Leon de Aranoa, quien ganó gracias a esta obra el Premio Goya a Mejor Dirección Novel.
La premisa nos presenta a toda una familia reunida para celebrar el cumpleaños del padre, Santiago. Cada uno de ellos se arregla lo mejor posible, deja listo su regalo y se sienta en la mesa a esperar con gran expectación. Parece la imagen idílica de una familia modélica. Sin embargo, notamos algo extraño en el ambiente. Los primeros regalos son recibidos con afecto, gratitud y risas hasta que llegamos al del hijo pequeño. Santiago abre el regalo y se encuentra para su sorpresa con una pipa, cuando él resulta que no fuma. Acto seguido, Santiago tiene un arranque de ira y desprende severos insultos hacia el más pequeño de todos los hijos para finalmente marcharse ofuscado y dejarlos a todos ahí plantados.
La premisa nos presenta a toda una familia reunida para celebrar el cumpleaños del padre, Santiago. Cada uno de ellos se arregla lo mejor posible, deja listo su regalo y se sienta en la mesa a esperar con gran expectación. Parece la imagen idílica de una familia modélica. Sin embargo, notamos algo extraño en el ambiente. Los primeros regalos son recibidos con afecto, gratitud y risas hasta que llegamos al del hijo pequeño. Santiago abre el regalo y se encuentra para su sorpresa con una pipa, cuando él resulta que no fuma. Acto seguido, Santiago tiene un arranque de ira y desprende severos insultos hacia el más pequeño de todos los hijos para finalmente marcharse ofuscado y dejarlos a todos ahí plantados.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Aquí es donde se nos revela el giro que articula toda la película. Está familia no es real, todo es una mentira. Son todos actores contratados por Santiago para fingir ser su familia por un día. Más tarde entrarán en escena el hermano del padre y su cuñada, por supuesto, también son actores. Ninguno conoce las intenciones de Santiago. Quizás se siente sólo, está loco o simplemente se aburre. Todo ello se vuelve secundario. Se suele decir que la familia no se elige, pero está si que lo ha sido.
Hay un gran enfoque dramatúrgico en la manera en que interactúan los personajes entre sí y no únicamente por el hecho de que sean actores. Todos ellos tienen que actuar para Santiago fingiendo ser un ser querido. Cuando Santiago entra en escena, cada uno de ellos asume el rol familiar que le corresponde. Santiago intenta ser cariñoso con su esposa, preocuparse por la vida romántica de su hija o por los estudios de su hijo. En los ratos que Santiago está ausente es como si los demás estuvieran entre bambalinas. Ahí es donde veremos sus verdaderas personalidades y donde afloran las auténticas relaciones casi familiares que van creándose entre todos ellos.
De este modo, Familia nos incita a tener cierta autorreflexión sobre como pueden ser algunas de nuestras relaciones familiares. Viviendo juntos, pero a veces sabiendo tan poco los unos de los otros; contando historias que los demás han olvidado, no recordando detalles de cómo son los gustos o intereses de ese ser querido o dejando de lado las preguntas íntimas sobre sus sentimientos. A veces resulta que la familia es como el teatro y esta película lo refleja con gran inteligencia.
Hay un gran enfoque dramatúrgico en la manera en que interactúan los personajes entre sí y no únicamente por el hecho de que sean actores. Todos ellos tienen que actuar para Santiago fingiendo ser un ser querido. Cuando Santiago entra en escena, cada uno de ellos asume el rol familiar que le corresponde. Santiago intenta ser cariñoso con su esposa, preocuparse por la vida romántica de su hija o por los estudios de su hijo. En los ratos que Santiago está ausente es como si los demás estuvieran entre bambalinas. Ahí es donde veremos sus verdaderas personalidades y donde afloran las auténticas relaciones casi familiares que van creándose entre todos ellos.
De este modo, Familia nos incita a tener cierta autorreflexión sobre como pueden ser algunas de nuestras relaciones familiares. Viviendo juntos, pero a veces sabiendo tan poco los unos de los otros; contando historias que los demás han olvidado, no recordando detalles de cómo son los gustos o intereses de ese ser querido o dejando de lado las preguntas íntimas sobre sus sentimientos. A veces resulta que la familia es como el teatro y esta película lo refleja con gran inteligencia.