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Voto de thedanger89:
1
Voto de thedanger89:
1
3.7
1,251
31 de mayo de 2024
31 de mayo de 2024
69 de 75 usuarios han encontrado esta crítica útil
Posiblemente sea una de las primeras personas en el mundo en haber visto este film en cines, ya que se estrenaba hoy, 31 de Mayo en España y una semana más tarde en el resto del mundo (además de que era la primera sesión y estábamos solos en el cine mi padre y yo).
A veces, me pregunto cómo actores del calibre de Russell Crowe se prestan a aparecer en semejantes esperpentos. Da la sensación de que muchos actores míticos de Hollywood estén atravesando un duro momento económico que les obligue a agarrarse a un clavo ardiendo, y, en este caso, el clavo desprendía fuego valyrio.
Es difícil entrar al tema sin hacer ningún tipo de spoiler, pero en contraposición de su anterior película de la misma temática, "El exorcista del Papa" (que no es una obra de arte pero se deja ver con soltura), The Exorcism es un amalgama de malas interpretaciones, situaciones incoherentes, fallos argumentativos y errores garrafales de índole religiosa.
Al ver un reparto tan variopinto con otros destacables como Sam Worthington o Adam Goldberg, esperas cierto nivel al que en ningún momento del largometraje se acerca ni de lejos. De hecho, sus papeles son tan efímeros y miserables que bien podría haberlos interpretado cualquier aprendiz de escena.
Desde la trama hasta los efectos especiales, pasando por el guion (parece de comedia) y los escenarios, son totalmente ridículos.
Está cargada de tantos momentos en los que dices "¿en serio? ¡venga ya! ¿porqué sigo aquí sentado?" que desearás no haber pagado por ver semejante bodrio. Sin lugar a dudas saldrás de la sala de cine queriendo recuperar tu dinero. No la recomiendo ni para una tarde palomitera en casa.
Por último, me gustaría mencionar la deriva absurda que está tomando el cine de "terror" de estos últimos años. Como espectadores, nos tragamos una media de 30 películas del género al año entre exorcismos, niñas fantasma en camisón y asesinos en serie plagiados de los slashers ochenteros pero sin carisma alguno, cada cual peor que la anterior, que, en mi caso, me hace replantearme porqué sigo siendo tan amante del cine si tengo la sensación de que los directores solo tratan de burlarse del espectador. ¿Qué está pasando con el séptimo arte que no levanta cabeza en ningún género?
A veces, me pregunto cómo actores del calibre de Russell Crowe se prestan a aparecer en semejantes esperpentos. Da la sensación de que muchos actores míticos de Hollywood estén atravesando un duro momento económico que les obligue a agarrarse a un clavo ardiendo, y, en este caso, el clavo desprendía fuego valyrio.
Es difícil entrar al tema sin hacer ningún tipo de spoiler, pero en contraposición de su anterior película de la misma temática, "El exorcista del Papa" (que no es una obra de arte pero se deja ver con soltura), The Exorcism es un amalgama de malas interpretaciones, situaciones incoherentes, fallos argumentativos y errores garrafales de índole religiosa.
Al ver un reparto tan variopinto con otros destacables como Sam Worthington o Adam Goldberg, esperas cierto nivel al que en ningún momento del largometraje se acerca ni de lejos. De hecho, sus papeles son tan efímeros y miserables que bien podría haberlos interpretado cualquier aprendiz de escena.
Desde la trama hasta los efectos especiales, pasando por el guion (parece de comedia) y los escenarios, son totalmente ridículos.
Está cargada de tantos momentos en los que dices "¿en serio? ¡venga ya! ¿porqué sigo aquí sentado?" que desearás no haber pagado por ver semejante bodrio. Sin lugar a dudas saldrás de la sala de cine queriendo recuperar tu dinero. No la recomiendo ni para una tarde palomitera en casa.
Por último, me gustaría mencionar la deriva absurda que está tomando el cine de "terror" de estos últimos años. Como espectadores, nos tragamos una media de 30 películas del género al año entre exorcismos, niñas fantasma en camisón y asesinos en serie plagiados de los slashers ochenteros pero sin carisma alguno, cada cual peor que la anterior, que, en mi caso, me hace replantearme porqué sigo siendo tan amante del cine si tengo la sensación de que los directores solo tratan de burlarse del espectador. ¿Qué está pasando con el séptimo arte que no levanta cabeza en ningún género?