Entiendo que guste, la película es muy entretenida a pesar de durar casi dos horas, su ritmo no decae ni se vuelve monótona, las interpretaciones son muy buenas, su humor también está logrado y logra mezclar bastante bien el thriller y la comedia. También consigue y este es su mayor mérito que nos interesen sus protagonistas a pesar de no empatizar o por lo menos yo o lo hice con ninguno de los personajes, son muy desagradables.
Pero a mí no me llego, se vuelve muy discursiva, baja linea todo el tiempo, toda la gente rica y poderosa lo es por ser una mierda, todos son depredadores, maquinas de cagar inocentes.
Interesante y quizás una burla a la política de identidad que la película fuera protagonizada por dos personas pertenecientes a minorías y ambas sean personas horribles, creo que es lo más original de la propuesta.
Es una farsa y creo que lo mejor que tiene es cuando se entrega por completo al entretenimiento inverosímil que cuando se toma en serio a sí misma.
La dirección me dejó un sabor agridulce, por momentos si logran que fluya todo pero por otros se torna videoclipera.
Nota de color: Eiza González consiguió uno de los mejores cirujanos del mundo, realmente quedó muy bien.