Lo malo es que muchos, muchisimos niños son maltratados, porque... ¿dónde están sus derechos psicológicos? son vapuleados, estan a merced de los sentimientos de los padres, que los tratan como muñecos, lo peor es que sin dejar de tratarlos con amor, pero como muñecos,...esto es maltrato. Es como el que dice: me pega porque me quiere...Psicológico maltrato. También es cierto que se antoja imposible que no chupen los sufrimientos de los padres, ya que estos viven por y para ellos, y en cuanto estos sufren por problemas que la sociedad les crea, o que ellos se crean, los niños ya están manchados de los padres y de la sociedad. En ellos ya está el germen de otros padres y otra sociedad que a su vez someterán otras inocentes y naturales almas. Esta película sería la escenificación de cómo se tira de ellos...como si el padre y la madre tiraran cada uno de un brazo, haciéndolos jirones, alma hecha jirones.
Por eso el niño se aparta, sin dejar de tener a su padre, el injusto a menudo, pero que hace todo por él, como su espejo, por muy cortante que sea.
Toda la pelicula está centrada en la cara del niño sufriente e imperturbable, una expresividad que implica su tomar distancias de la mierda que se le echa encima.
Esta película es muy buena porque muestra desde dentro, como en mirilla microscópica, cómo un chaval es maltratado sin que nadie diga nada, de hecho ni siquiera los exégetas que he leido hasta ahora hablan de eso, que sin duda es lo mas importante de una película muy bien hecha, con actores irreprochables y que debería pasarse en las escuelas de todo el mundo, para que la vieran juntos padres e hijos.