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Voto de Antonio Morales:
9
Comedia. Drama. Romance Tres hermanas de caracteres muy diferentes, hijas de un matrimonio de actores, mantienen entre sí una estrecha relación. La mayor, Hannah, la que tiene un carácter más fuerte, está casada con un rico empresario y su vida parece equilibrada, perfecta. Actriz de éxito, esposa y madre ejemplar, se ha convertido en el centro de gravedad de toda la familia. Holly, la segunda, sensible e inestable, sueña con ser actriz. Lee, la pequeña, es ... [+]
2 de diciembre de 2015
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Woody Allen acaba de de cumplir 80 años… ¡Cómo ha pasado el tiempo!, no sólo para él, para todos los que hemos seguido sus películas, agridulces, románticas, nostálgicas y siempre muy personales, aunque haya tenido influencias de sus amados Bergman y Fellini. Es el tributo que debe pagar todo cinéfilo que quiere ser cineasta. 80 años bien llevados porque sigue con su pasión por el Jazz y su nueva película anual que esperamos con interés. Ayer volví a ver, después de mucho tiempo “Hannah y sus hermanas”, uno de los mejores, trabajos de su carrera sin duda, narrada con una madurez asombrosa, Allen reflexiona sobre los temas que siempre ha tratado pero con el escepticismo de la experiencia: el amor, la familia, el sexo, la religión y la muerte encarnada en su patológica hipocondría, todo ello aderezado con su humor mordaz que va intercalando en medio de sus dramas.

Dicen que el artista siempre cuenta la misma historia, sólo con ligeras variaciones de sus temas, porque el espectador espera que sea siempre fiel a sí mismo. Y eso es lo que cuenta Allen, una gran comedia humana, una película coral estructurada en 15 cortos episodios de unos 6 o 7 minutos con su encabezado a modo de introducción. Sin ánimo de contar la película por mi parte, sólo pretendo aludir a cómo Allen demuestra su maestría descriptiva como narrador desde el primero titulado “Oh Dios, qué bella es”, mediante la cámara y los diálogos de los personajes.

Nos muestra que estamos en la celebración familiar del día de acción de gracias (fecha señalada en la cultura yanqui), que son tres hermanas: la mayor, Hannah es actriz de éxito pero añora el calor del hogar, la segunda, Holly es una buena cocinera que quiere abrir un restaurante y ha tenido problemas con la cocaína y la más joven, Lee que vive con un pintor extranjero que no asiste porque odia ese tipo de celebraciones. También sabemos que los padres de ellas, dos viejos cómicos retirados se llevan mal, y lo más importante, que el marido de Hannah siente atracción por una de sus hermanas. Todo ello en menos de 6 minutos, dice mucho de la sintaxis cinematográfica del artista.

Otro tema capital es que la historia no está contada en tercera persona sino que está contada por cada uno de los personajes del film. El personaje de Allen, un ex marido neurótico e hipocondríaco no es el principal de la historia que se la cede cortésmente al personaje de Michael Caine. Una película plena de emoción que une a la vez drama y comedia con unos diálogos brillantes que en los films de Allen son algo cotidiano que surge en cualquier momento, nunca busca énfasis para meter sus gags y chistes geniales. En definitiva, una crónica de costumbres por uno de los mejores cronistas del siglo XX, que analiza la época que le ha tocado vivir a su autor en la ciudad de sus sueños bellamente recreada, la ciudad que nunca duerme.
Antonio Morales
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