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Voto de Vivoleyendo:
9

Voto de Vivoleyendo:
9
7.0
28,771
Drama. Romance
En una plataforma petrolífera, aislada en medio del mar, donde sólo trabajan hombres, ha ocurrido un accidente. Una mujer solitaria y enigmática que intenta huir de su pasado (Sarah Polley) va hasta allí para cuidar de un hombre (Tim Robbins) que se ha quedado temporalmente ciego. Entre ambos nace una extraña intimidad, llena de secretos, verdades, mentiras, humor y dolor. Ninguno saldrá indemne de esta relación que marcará sus vidas ... [+]
15 de abril de 2007
15 de abril de 2007
17 de 23 usuarios han encontrado esta crítica útil
Algo inexplicable tiene esta película, que hace que no puedas olvidarla fácilmente. Tal vez sea que la protagonista se ha metido en su papel de tal modo que puedes sentir todas sus emociones como si fueran propias. Ella brilla con luz propia y da a su personaje una dimensión que, como sugiere el título, va muchísimo más allá de las palabras.
De hecho, las palabras son parcas y los diálogos se reducen al mínimo (exceptuando a un Tim Robbins más parlanchín). Sin embargo, todo derrocha elocuencia. Cualquier plano que sale, cualquier escena nos cuenta una historia basada más en lo que se calla que en lo que se revela.
La fotografía es hermosa y sosegada, ofrece una sensación de infinito y de soledad dolorosa. La soledad a la que muchos se enfrentan, bien sea voluntaria o involuntariamente.
Sí, el ritmo es lento, de acuerdo, pero no creo que le reste belleza y le aporta una suave delicadeza, una cadencia acorde con esa paz interior que todos luchan por alcanzar sin terminar de conseguirlo.
Hasta que, de repente, todo ese aparente sosiego se quiebra en alguna ocasión y te sorprendes a ti mismo con el corazón en un puño.
Se consigue que compartamos los dolores, las pequeñas alegrías, los momentos intrascendentes y los trascendentes.
Aparte de Sarah Polley (genial) y de Tim Robbins (correcto, pero bueno, su papel no daba para mucho más), los demás personajes se diluyen en las nieblas de su propio ostracismo.
Si quieren ver una película intimista, de ritmo pausado, muy dolorosa y con un duro mensaje subyacente, ésta es la suya.
La recomiendo para todos los que sean capaces de disfrutar de una película lenta pero HERMOSA. Aquí no hay persecuciones alocadas, ni tiros, ni diálogos desternillantes, no se acude a la risa fácil ni a la sensiblería facilona.
Si tiene algún fallo de consideración, que alguno tendrá, yo no he sabido captarlo (exceptuando alguna mediocre y prescindible actuación de algún personaje secundario). Pero los defectos que tenga son también necesarios para lograr que esta película sea tan especial.
De hecho, las palabras son parcas y los diálogos se reducen al mínimo (exceptuando a un Tim Robbins más parlanchín). Sin embargo, todo derrocha elocuencia. Cualquier plano que sale, cualquier escena nos cuenta una historia basada más en lo que se calla que en lo que se revela.
La fotografía es hermosa y sosegada, ofrece una sensación de infinito y de soledad dolorosa. La soledad a la que muchos se enfrentan, bien sea voluntaria o involuntariamente.
Sí, el ritmo es lento, de acuerdo, pero no creo que le reste belleza y le aporta una suave delicadeza, una cadencia acorde con esa paz interior que todos luchan por alcanzar sin terminar de conseguirlo.
Hasta que, de repente, todo ese aparente sosiego se quiebra en alguna ocasión y te sorprendes a ti mismo con el corazón en un puño.
Se consigue que compartamos los dolores, las pequeñas alegrías, los momentos intrascendentes y los trascendentes.
Aparte de Sarah Polley (genial) y de Tim Robbins (correcto, pero bueno, su papel no daba para mucho más), los demás personajes se diluyen en las nieblas de su propio ostracismo.
Si quieren ver una película intimista, de ritmo pausado, muy dolorosa y con un duro mensaje subyacente, ésta es la suya.
La recomiendo para todos los que sean capaces de disfrutar de una película lenta pero HERMOSA. Aquí no hay persecuciones alocadas, ni tiros, ni diálogos desternillantes, no se acude a la risa fácil ni a la sensiblería facilona.
Si tiene algún fallo de consideración, que alguno tendrá, yo no he sabido captarlo (exceptuando alguna mediocre y prescindible actuación de algún personaje secundario). Pero los defectos que tenga son también necesarios para lograr que esta película sea tan especial.