Añadir a mi grupo de amigos/usuarios favoritos
Puedes añadirle por nombre de usuario o por email (si él/ella ha accedido a ser encontrado por correo)
También puedes añadir usuarios favoritos desde su perfil o desde sus críticas
Nombre de grupo
Crear nuevo grupo
Crear nuevo grupo
Modificar información del grupo
Aviso
Aviso
Aviso
Aviso
El siguiente(s) usuario(s):
Group actions
You must be a loged user to know your affinity with baskin 26
- Recomendaciones
- Estadísticas
- Sus votaciones a categorías
- Críticas favoritas elegidas por baskin 26
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de baskin 26:
8
Voto de baskin 26:
8
2010 

7.8
12,483
Documental
Largometraje documental que recorre la vida del legendario piloto brasileño Ayrton Senna (1960-1994), desde la temporada de su debut en 1984 hasta su prematura muerte una década después en el Gran Premio de San Marino. Cuenta con material sorprendente e inédito extraído en gran parte de los archivos de la Fórmula 1. (FILMAFFINITY)
19 de abril de 2011
19 de abril de 2011
5 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Si lo pensamos fríamente, hay pocos deportes tan absurdos como la F1. Se trata básicamente de dar vueltas lo más rápidamente posible a un circuito cerrado y ya está. Ganar un segundo, o menos aún, puede suponer millones y millones en inversión, horas y horas de preparación y ensayos... Pero si verdaderamente creemos que eso es la esencia de la F1 es que no hemos entendido nada. La fórmula 1 es un negocio pero también, y sobre todo, es la lucha del hombre por crear máquinas lo más perfectas posibles, alcanzar los límites de la física, derrotar al tiempo, el eterno afán de superación del hombre, el intento de conquistar territorios inexplorados y alcanzar metas insospechadas.
Sigo la fórmula 1 desde principios de los 80, nunca fui sennista (me gustaba más la frialdad de Prost) pero cada vez que lo veía no podía apartar la vista de él. Siempre me sorprendía, su apasionamiento, su talento innato para pilotar, su fe en sí mismo y en la victoria, su capacidad para sobreponerse a la adversidad y su facilidad para ser rápido en cualquier circunstancia. Era la perfecta simbiosis máquina-hombre, antes creo que nunca se había dado y después estoy seguro de que no. Senna fue un piloto excepcionalmente dotado para la conducción y el día en que murió... (¿o sólo dejó de ser inmortal?).
Siempre recuerdo al Senna de 1988 pilotando el Mclaren Honda MP4/4. Una máquina de 540 kg. que rendía 800 caballos y pintado con los colores de Marlboro. Aunque también lo recuerdo con el Lotus amarillo y negro pintado con los colores de John Player Specials o con el Williams Renault de principios de los noventa con los colores de Rothmans...
Sigo la fórmula 1 desde principios de los 80, nunca fui sennista (me gustaba más la frialdad de Prost) pero cada vez que lo veía no podía apartar la vista de él. Siempre me sorprendía, su apasionamiento, su talento innato para pilotar, su fe en sí mismo y en la victoria, su capacidad para sobreponerse a la adversidad y su facilidad para ser rápido en cualquier circunstancia. Era la perfecta simbiosis máquina-hombre, antes creo que nunca se había dado y después estoy seguro de que no. Senna fue un piloto excepcionalmente dotado para la conducción y el día en que murió... (¿o sólo dejó de ser inmortal?).
Siempre recuerdo al Senna de 1988 pilotando el Mclaren Honda MP4/4. Una máquina de 540 kg. que rendía 800 caballos y pintado con los colores de Marlboro. Aunque también lo recuerdo con el Lotus amarillo y negro pintado con los colores de John Player Specials o con el Williams Renault de principios de los noventa con los colores de Rothmans...
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
La forma perfecta de morir es en Monza pilotando un Ferrari. El bicampeón Alberto Ascari lo hizo en 1955.