Me he puesto a ver Evil Dead Rise con algunas (pocas) expectativas por causa del hype, pero la verdad es que la decepción ha sido mayúscula y no entiendo las alabanzas, a no ser que sean cuestiones de marketing. Como fan absoluto de la saga, me parece la más floja con diferencia. Por supuesto, no llega ni al talón de la trilogía original (incluso de la segunda). Y por lo que hace a las versiones modernas, el remake de 2013 es muy, muy superior, con toda la esencia de la querida Posesión infernal. Hasta la serie de Netflix es mucho más disfrutable, desde un punto de vista gamberro.

Cuidado, Evil Dead Rise no es una película mala. Tiene alguna escena bien planteada, un buen ritmo, las dos protagonistas adultas actúan bien, el hecho de situarla en un ambiente urbano es original, la fotografia y algunas ideas de cámara están bien aprovechadas, tiene ideas de sonido interesantes, y es una película mucho más atrevida que la mayoría del cine de terror americano comercial. El nuevo Necronomicón está muy chulo (pero mil veces mejor el icónico original), algún deadite tiene un diseño divertido. Ver SPOILERS 1. Pero hasta aquí.

Todo ello queda muy lastrado por un guión torpe, que no se cree a sí mismo, con agujeros clamorosos, algún diálogo ridículo y secuencias rejuntadas con pinzas. Y, sobre todo, no ofrece nada original o fresco. Las mejores ideas, como el uso del angular, la distribución claustrofóbica del espacio, el manido fuera de campo para generar inquietud, el uncanny valley de los deadites, los baños de sangre y el humor socarrón, son todo calcos de las anteriores películas de Evil Dead o otras obras maestras como El Resplandor, Braindead o Babadook. Y no sé si es que estoy ya muy curtido, pero el despliegue de gore que tanto prometía, me ha dejado frío.

Otra cosa que la desdibuja es la inclusión forzada de ideas woke. Veo a los buenos de Tapert y Raimi buscando financiación en Warner y los jefazos diciéndoles: "Si queréis panoja tenéis que poner esto y esto otro, además así apelaréis a una audiencia nueva, de la Generación Z". Pero no lo hacen nada bien. Si se quiere hacer una buena película de terror con un subtexto o segundo nivel de lectura SJW, se puede hacer como lo hace la extraordinaria Barbarian. Y para apelar a la Gen Z, hay ejemplos cojonudos como Talk to me, sin tratar a los críos como si fueran tontos. Aquí queda postizo, como cuando en las infames películas de Pajares y Esteso ponían señoras ligeras de ropa para el fanservice braguetero. Y, como ellas, caducará muy rápido. Sobre el tema sigo en los spoilers (2)

En conclusión, es entretenida, se pasa rápido y puede generar algún momento de tensión, con agradables guiños a la trilogía original, pero espero que las siguientes vayan más por el camino del remake y nos muestren ideas más frescas. Recomendada si eres muy fan de la saga y quieres completar o si no tienes ninguna otra mejor de terror por ver.

Cuando salimos de la sala, todos hicimos el mismo gesto: respirar, porque es lo único que no puedes hacer durante toda la película.

Normalmente, ir a ver una película de terror supone una montaña rusa de emociones, en la que existen momentos álgidos de tensión en los que no podemos despegarnos del asiento, y momentos de calma, en los que se nos deja un ratito para asimilar lo que acabamos de ver mientras nos preparemos para el siguiente momento cumbre. Pero en Evil Dead Rise se han comido estas reglas no escritas, y nos las han escupido en la cara en estas dos horas de metraje en el que en todo momento estaremos en el punto álgido de la película, puesto que esta nueva entrega de la saga no nos da tregua alguna. Aquí no existen las introducciones interminables que los directores insisten en meter antes de dar paso a la acción, sino que la película tendrá acción de principio a fin sin darnos ni un minuto de descanso.

Cuando te propones realizar una película en la que mantienes sometido constantemente al espectador a golpes de guion sin dejarle un respiro, corres el riesgo de que éste pierda la sensibilidad y acabe perdiendo el interés, pero en este caso, cada escena es mejor aún que la anterior y, lejos de aburrir, lo que se consigue es un frenesí audiovisual que nunca antes se ha visto en el cine del género, en el que estaremos con el corazón en un puño hasta que aparezcan los créditos finales.

Otra de las características fundamentales de Evil Dead Rise es su uso desmedido del humor negro, que además de estar metido de una forma más que acertada funcionando como vía de escape de la tensión en la que la película nos pone de forma constante, se usa para jugar con nosotros, ya que la película consigue que soltemos un par de carcajadas nerviosas en alguna ocasión, que se nos borrarán de la cara en el siguiente minuto, en el que volveremos a estar arañando la butaca.

Es necesario hacer una mención especial al casting, ya que todos y cada uno de los actores lo bordan, aunque si hay alguien que marca los ritmos, y que nos ha regalado una actuación que se quedará grabada en las retinas de todos los amantes del género, es Alyssa Shutterland, que se come la pantalla a bocados, con sus gestos, sus chillidos y sus miradas.

En cuanto al guion, encontramos distintas referencias a los grandes clásicos del terror como El Resplandor o The Texas Chainsaw Massacre, entre otras, aunque no obstante, se quedan en eso, en referencias, porque Evil Dead Rise no intenta imitar, sino reinventar, y lo consigue con creces al proponernos una trama distinta, en la que los miembros de una familia se transmiten una posesión demoniaca como si de un virus se tratase, en el marco de
un pequeño apartamento que generará en el espectador una sensación constante de claustrofobia.

Existe una diferencia entre las películas de posesiones al uso y ésta, ya que en esta ocasión, los endemoniados no son capaces de atravesar paredes ni puertas, sino que son personas de carne y hueso que intentarán asesinarse entre sí de las formas más viscerales y originales posibles (ni rastro de los cuchillitos ni pistolitas que ya nos tienen cansadíitos) dando lugar a un cóctel explosivo cargado de litros y litros de sangre y mucho, pero que mucho mal rollito.

Aunque la construcción de los personajes es bastante escueta, es más que suficiente para que consigamos empatizar con ellos, meternos en su piel y sufrir con ellos como si les conociéramos de toda la vida, algo que no sucede en algunas películas de terror en las que se tiran prácticamente una hora revelándote las aspiraciones de los protagonistas para que les conozcas al dedillo, pero sin embargo sientes la misma empatía por ellos que de la que sientes por una papa frita, osea, ninguna.

A nivel técnico, la película es irreprochable: planos innovadores (especial mención a la escena de la mirilla), un sonido envolvente que provocará que no bajemos la guardia en ningún momento y unos efectos especiales dignos de ser premiados.

En definitiva, estamos ante un producto que ha cambiado completamente las reglas del cine de terror aportando frescura y novedad al género, tanto a nivel técnico como a nivel de trama, ganándose, sin lugar a dudas, un lugar en el podium de mis películas de terror favoritas de todos los tiempos.

Cuando se califica una película con un 7 y tiene una temática "TEENAGERS" hay que dar, creo una pequeña explicación.

No es que la cinta se una obra magistral ni que se saque una enseñanza reveladora de la misma... pero hay que reconocer que cumple con creces lo que se esperaba de ella.

Es una película de miedo con ciertos tintes gore, que hacen las delicias de un público que espera pasar un par de horas de entretenimiento pasando algo de miedo y un poquito de asco.

El argumento tiene su cierta originalidad, es sostenible (dentro del género),y aunque tiene sus fallos se le pueden perdonar porque la historia, por su calidad, es divertida y, después de todo, no deja de ser una cinta, como he dicho antes, para pasar un buen rato sin pretensiones.

Su atmósfera esta muy bien creada y su fotografía es bastante claustrofóbica, lo que le da un punto bastante positivo al conjunto.

Las interpretaciones son adecuadas, eso significa, que sin llegar a Oscar, están bien hechas.

A veces, no es necesario hacer el Exorcista para realizar una gran película de miedo, solo es necesario ser original, entretenido y echar mucha sangre por todos lados.

Debo reconocer que cuando vi el tráiler por primera vez, me llamó la atención, al estilo de SMILE, pero no estaba convencido de verla, porque claro, al ser otra peli más de una franquicia pensaba que sería otra peli más del montón de secuelas y remakes que se hacen hoy en día en Hollywood una y otra vez.

Pero la peli ha cogido y me ha pegado una patada en toda la boca y me ha poseído igual que ocurre en la propia peli de EVIL DEAD RISE, porque me ha sorprendido para bien, y me ha parecido una de las mejores pelis de terror que he visto en estos últimos años, no tanto por su argumento o por su calidad fílmica, sino porque el terror de esta peli funciona a las mil maravillas.

El que no lo sepa, esta peli, es una especie de recuela de la saga EVIL DEAD iniciada en el año 1981 con POSESIÓN INFERNAL dirigida por Sam Raimi y protagonizada por el ya mítico Bruce Campbell como el brutal personaje de Ash. La saga continuó con la secuela del año 87 y otra más del 92. Pero si fuera poco, además de la trilogía original existe una serie llamada Ash vs Evil Dead y otro Remake de la peli original del año 2013.

Estas pelis las menciono para que si os animáis, veáis la saga, porque todas las películas tratan de un libro que provoca que un espíritu empiece a poseer a las personas y a provocar el caos de la forma más violenta, agresiva y casi hasta depravada que se ha visto en el cine, eso sí, con un toque de humor en la trilogía original que por ejemplo no se ve en el remake de 2013, ya que se trata de un remake con un carácter de terror más serio.

El caso de EVIL DEAD RISE, se trata de una peli de terror seria, con algún toque exagerado a posta para relajar un poco, porque en serio, si no entras sabiendo lo brutal que te espera, es que no sales vivo de la sala de cine, porque lo que se ve en la peli es un dramón superterrorífico, de verdad, es muy fuerte lo que se ve durante los 90 minutos que dura la cinta.

Ya solo el inicio de la peli es brutal, ya veréis por qué, aunque en mi opinión está hecho un poco sin sentido, pero bueno, te sirve para entrar de lleno a la película. Luego la historia se basa en una joven que se dedica al mundo de la música, como técnica, y va de visita a la casa de su hermana, donde viven también sus 3 hijos, pero esconden un drama personal bastante importante que iremos indagando con el paso de los minutos, pero de repente aparecerá el ya famoso libro del demonio que provocará el caos absoluto en esa casa, y por supuesto veremos todo un seguido de escenas repletas de violencia, mal rollo, tensión, y mucha sangre, porque otra cosa no, pero sangre hay a raudales, que parece que cuando uno sale de la sala, uno tiene la necesidad de ducharse para quitarse la sangre ficticia que uno ve a chorros por la pantalla.

A su favor, debo decir que la sangre no se ve falsa, ni tampoco exagerada, sino que logra realismo e impacto en el espectador continuamente. Y esto es algo que se goza mucho, y es el carácter analógico que parece tener la peli, porque da la sensación de que se ha grabado con muchos efectos prácticos como maquillaje y sangre falsa para salir sin un cgi que hoy en día no se cree ya nadie, así que ya solo por eso, ya merece la pena.

Pero es que es un absoluto drama familiar, es una madre poseída que está atacando a su propia hermana y a sus hijos, y la verdad es que uno empatiza con ellos y es que choca. Por ello funciona muy bien el clima de terror que han querido crear y es una gran película de terror.

Así que si os mola el cine de terror, ir a verla; si queréis ver una peli de terror violento, tenéis que ir a verla; y por supuesto, si queréis disfrutar de un clima de tensión absoluto, tenéis que ir corriendo a verla, porque en definitiva me parece un absoluto éxito inesperado y que sinceramente me atrevo a calificar como una de las mejores películas de terror de estos últimos años, y sin necesidad de ser demasiado complejo ni con una puesta en escena macabra.

Así que ojalá que las pelis de terror venideras, si quieren hacer terror al uso, que cojan papel y boli y aprendan de EVIL DEAD RISE, porque así debería de ser el terror que todos califican como convencional, pero que en este caso es un total éxito.

Evil dead el despertar, es una resurrección de una saga que realmente no ha muerto y que entrego un muy buen remake en 2013, ahora dicho esto la película en si no logra estar a la altura de sus predecesoras, pero de igual forma es una muy buena cinta. La principal fortaleza de Evil dead Rise es que, aunque entiende que pertenece a un nicho muy específico, se atreve a traer cambios muy importantes que le dan un aire de frescura.
Evil dead siempre se ha caracterizado por sus exquisitos efectos prácticos, afortunadamente esta nueva entrega presenta quizá los más crudos, realistas y detallados, algo que le permite al espectador adentrarse más en las escenas de Body horror.
El feminismo esta ejemplificado en esta película casi a la perfección ya que nunca se habla de este a través de sus diálogos, pero si permite que el espectador lo compre, sin necesidad de estar ahí porque si o inclusive ser pretencioso.
Alyssa Sutherland es increíble, tanto en su lado dramático como en la parte más tétrica y terrorífica de su personaje logrando que cada vez que salga en pantalla logre generar una conexión muy fuerte y vibrante con su destino, al mismo tiempo es capaz de estremecer con solo una ligera expresión facial.
Ahora, no todo es perfecto y la principal razón por la cual, la cinta logra ser el menos bueno de la franquicia es porque no explota todo lo que quiere presentar, sobre todo en esta representación de la maternidad, de la unión entre hermanas, porque está demasiado enfocada en todo lo más terrorífico que no se toma el tiempo de desarrollar estas temáticas.
El tono en mi concepto es irregular porque realmente nunca se decide si ser una cinta seria y profunda o ser una comedia de terror, hay un desbalance tonal bastante importante, aunque se evidencia más en la comedia porque pareciese que esta la incluyeron solamente por la nostalgia.
En conclusión, Evil dead Rise es una película sumamente terrorífica, con grandes actuaciones y temáticas interesantes, pero desafortunadamente nunca llega a ser muy profunda y no tiene un buen balance entre la comedia y lo serio.