Otra de las diversas películas, (muy pasada por televisión), en la que Tom Hanks demuestra sus dotes para la comedia junto a la televisiva Shelley Long, (Cheers), en una horrible y chapucera casa.
Sinceramente es una película divertida, repleta de buenos y eficaces gags, pero se queda en eso, una cinta dedicada a entretener durante una hora y media, de visionado fácil, y olvido aún más fácil.

En la decada de los 80, spielberg era el rey midas por excelencia, y en cualquier producción que se precie, aparecía su nombre sobreimpresionado en la pantalla, ejemplos como regreso al futuro, fievel y el nuevo mundo, gremlins, por solo mencionar algunas. En esta pelicula se nota la mano del maestro spielberg, esta pelicula de richard Benjamin cuenta con una gran fotografía a cargo de una de las leyendas de la dirección de fotografía de hollywood; Gordon Willis ¨la rosa purpura del cairo¨. La pelicula contiene una especie de homenaje al slapstick y cine mudo, lo cual parece más una idea del propio spielberg. Estamos ante una comedia de gran factura y que con los años ha ganado mucho. En el apartado de banda sonora, es obra de Michel Colombier, compositor y arreglista que acierta muy bien con la bso empleando ese toque años 20 a algunos pasajes de su score.

Resumiendo: un clásico de la factoria años 80,s spielberg.

Entretenida y divertida comedia, sobre las desgracias de una pareja ante una casa que se cae a cachos, imbuida de un humor típicamente ochentero, con un Tom Hanks que empezaba a despuntar como actor de comedias y una Shelley Long, que era toda una celebridad en ese momento debido a su papel como Diana en Cheers y dirigida por un especialista de los de antes (Richard Benjamin), que era toda una garantía de que te ibas a encontrar con algo bastante entretenido.
Recomendable.

Richard Benjamin (Ciudad muy caliente, Sirenas) dirigió en 1986 Esta casa es una ruina, una producción de Steven Spielberg englobada en los inicios de la carrera del oscarizado Tom Hanks, cuando se dedicaba única y exclusivamente a roles de comedia.

En la década de los ochenta, Hanks consiguió mucha popularidad por protagonizar comedias tan divertidas como Un, dos, tres... Splash, Despedida de soltero, Dos sabuesos despistados, No matarás al vecino, Socios y sabuesos o la película que hoy nos ocupa. Aunque de entre todas ellas, la que le dejó más huella fue Big, demostrando que era capaz de otros registros interpretativos. Luego, en los noventa, llegarían Philadelphia y Forrest Gump, las cuales catapultarían su fama hasta la cima del estrellato.

Centrándonos en Esta casa es una ruina, diré que es una comedia que podría catalogarse incluso de índole menor, entre toda la filmografía de Tom Hanks. No es la mejor ni la más divertida, sin embargo funcionó bastante bien. Las peripecias de dos enamorados que compraban una casa, la cual se caía a pedazos, resultaron bastante divertidas para el gran público. Incluso todos empatizábamos con el personaje de Hanks en los momentos en los que el film decae, con un triángulo amoroso entre Alexander Godunov (aquel malvado terrorista rubio con el que Bruce Willis tuvo sus más y sus menos en Jungla de cristal), Shelley Long (que por aquel entonces gozaba de bastante fama por protagonizar la célebre serie Cheers) y el propio Hanks.

A pesar de que, como ya he dicho, no es la mejor comedia de Tom Hanks, hay que destacar algunos buenos detalles, como la imponente banda sonora, capaz de entremezclar hábilmente música clásica con música moderna de la época. Otro factor a tener en cuenta son los homenajes a la antigua comedia de cine mudo, los cuales están repartidos por todo el film.

En resumidas cuentas, se trata de una película para pasar el rato. Muy divertida en lo que se refiere a la cantidad de peripecias y locuras que pueden suceder en la casa en cuestión (verdadera protagonista del film), pero de ritmo inconstante, además de previsible en exceso.

Argumento:

Anna, una atractiva violinista, vive provisionalmente con su novio Walter en el apartamento de su ex-marido. Cuando éste descubre la situación, la pareja se ve obligada a buscar otra vivienda. Un amigo de Walter, que es agente de la propiedad, le proporciona una auténtica “ganga” en las afueras de la ciudad. (FILMAFFINITY)

Juicio:

Efectiva comedia, que aún hoy sigue entreteniendo y gustando como en los pasados 80. Representa una buena manera de volver atrás en el tiempo y revisar los geniales papeles cómicos que Tom Hanks bordaba y las películas tan amables y sin complejidades o tragedias que protagonizaba. Gracias a la interpretación de su pareja protagionista, a unos buenos gags, a un muy buen guión y a esa casa infernal cuyos embistes están rodados con genial eficacia, "Esta casa es una ruina" es una gran comedia y una perfecta manera de reírte a carcajadas y pasarlo muy bien. Ya no se hacen películas como éstas.