Barb Wire
2.1
5,758
Acción. Thriller. Ciencia ficción
Barb Wire (Pamela Anderson) es cortante como un cuchillo y fría como el hielo, pura dinamita, y no se anda con tonterías. Vive en un país devastado por la guerra civil, en un futuro no muy lejano. Es una mujer con valores en un mundo carente de esperanza. Todos la desean, pero nadie puede conseguirla: ella no pierde el tiempo con hombres que no tengan un buen cerebro. Hace ya mucho tiempo que Barb Wire sólo se ayuda a sí misma... pero ... [+]
27 de noviembre de 2023
27 de noviembre de 2023
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El 1.er número del cómic de "BarbWire" escrito por John Arcudi, publicado en 1.994 desde una filial de Dark Horse y que sólo duraría una tirada de nueve números hasta retomarse en varias ocasiones, tenía una inolvidable portada donde la heroína aparecía montada en su moto, apuntando hacia arriba y profiriendo furiosa "Don't call me "babe"!".
Sinceramente había pocas mujeres que pudieran encarnar a esta mercenaria de los barrios de Steel Harbor, ciudad hundida en el crimen y la corrupción mientras su retorcido mundo alternativo presentaba cyborgs, mutantes que parodiaban a los X-Men, experimentos y alienígenas, todos enzarzados en violentas rencillas. Mezcla brutal y excéntrica de novela negra y Amazing Stories que pedía trasladarse a la gran pantalla...o tal vez no, pues se hizo realidad de la peor manera posible, en esa época en que las adaptaciones de tebeos de acción y ciencia-ficción estaban a la orden del día, no con mucho éxito, así como las películas con fuertes y exuberantes protagonistas femeninas.
Y nadie había más exuberante que Pamela Anderson, aún en la eterna búsqueda de un papel que le permitiera saltar al estrellato, ¿pero era la más indicada para encarnar a un personaje de tan poca vida? Yo creo que Shannon Tweed o Cynthia Rothrock hubiesen sido mejor opción, porque además de que las cosas fueron mal cuando a Adam Rifkin le sustituyó el director de videoclips David Hogan, a quien ni siquiera permitieron ver el corte final, la rubia no atravesaba su mejor momento; maltratada por su marido (Tommy Lee), con aquel infame video casero sexual robado y circulando por todas partes y dependiendo de su físico para poder abrirse camino en las más pobres producciones, llevar el elaborado tebeo a carne y hueso no la iba a ayudar mucho...
Ni siquiera la larga (y espectacular) introducción ideada por ella misma donde su álter-ego nos regalaba un striptease siendo mojada por unas mangueras iba a servir para soportar el metraje restante. No tenía sentido la escena, pero desde las mesas un tipejo la insta a seguir desnudándose, llamándola "muñeca"...y de un taconazo en la frente acaba con él, o con lo que figuraba: ese público que sólo estaba deseando verla como en la cinta de vídeo, por tanto sus intenciones quedan claras. Y todo lo que sucede durante estos primeros minutos es sólo la típica introducción del héroe, una Barbara Kopetski que hace trabajos peligrosos por el mejor dinero que la ofrezcan a la vez que dirige el famoso pub Hammerhead, una combinación imponente de "Snake" Plissken, Nikita y el Bruce Willis de "El Último Hombre".
Pero lo más atractivo es el estilo visual, tan de los '90, tan cutre y excesivo, tan heredero de Cannon y las películas de Albert Pyun, y que reproduce bien los escenarios retrofuturistas y los ambientes cargados de violencia del tebeo, con cielos anaranjados a lo Tony Scott; el guión, sin embargo, deja ausente la colorida y alucinógena fauna que pululaba en las páginas y mete a su muñeca en un conflicto más típico de la ciencia-ficción "punk" post-apocalíptica de entonces, cuando una científica (Cora) intenta esquivar al despiadado Gobierno con la cura para un arma biológica, yendo tras sus pasos ese típico grupo de psicópatas que siempre tienen que ser nazis futuristas o por el estilo...
Se podría haber imaginado una trama más fantasiosa o más cercana al cine negro teniendo en cuenta los guiños a "Casablanca", pero este embrollo de conspiraciones, armas secretas, espionaje y dobles identidades recuerda a "Cyborg", "Desafío Total", "Rescate en L.A." y derivados del mismo orden. En él se cruzan diálogos vergonzosos y desagradables arquetipos con unas funciones no del todo claras (menos el hermano ciego, que desde el principio sabemos está para servir de cebo a los villanos), de los cuales se podría decir que Barbara es el Rick de Humphrey Bogart y Axel la Ilsa de Ingrid Bergman.
Pero la sentencia de muerte sucede porque Hogan no imprime ritmo al guión, y sus escenas de acción son rutinarias y sin emoción, mientras la sra. Anderson, que dio todo de sí misma, incluso se arriesgó sin dobles en algunas secuencias peligrosas, no puede evitar exponer algo más que sus excitantes curvas: su mediocre interpretación. Esta guerrera tan atractiva nos obsequia de vez en cuando con una profunda narración en primera persona, pero no se desarrolla de ninguna de las maneras, cae poco a poco y pierde credibilidad al ser sus actos dirigidos por otros, y no al revés (sobre todo cuando aparece su antiguo romance, Alex), y la intriga tampoco se mueve por muchos escenarios, desinflándose en el tedio.
Se insinúan, incluso muestran, detalles de su pasado que al final no son cubiertos por los cabezas huecas responsables del guión. Ni el resto de personajes, que no salen de los estereotipos, como esa Resistencia sin cabida en la historia, esa científica que sólo habla de sus planes unos minutos o ese villano ridículo en extremo (Pryzer) que en su última lucha con la protagonista sólo ríe compulsivamente; llegados a este punto ni la propia locura surrealista en la que se apoya el film lo salva. Todo huele a cutrez insoportable aquí. ¿Cómo alguien puede hacer tan aburrida una persecución llena de explosiones y disparos?, porque presupuesto hay, pero no destreza tras la cámara...
Ni delante, y eso que tenemos a Udo Kier, Temuera Morrison o Xander Berkeley en el reparto. No llega a la sensación nauseabunda de "Juez Dredd" ni a la tremenda vergüenza ajena de "Skyscraper", otra de acción con modelo Playboy; "BarbWire" simplemente está ahí, en mitad de todo y de nada, y reafirmó la mala estrella de Anderson, cuyo intento en el "gran cine" fue despreciado por crítica y público de forma muy cruel, pero en lo personal yo la prefiero mil veces antes que a la Carrie-Anne Moss de "Matrix" o a la Milla Jovovich de "El Quinto Elemento", así que para ella van dos puntos sin dudarlo, y el otro...
quizás porque, pese a todo, ofrece un rato de humilde entretenimiento.
Sinceramente había pocas mujeres que pudieran encarnar a esta mercenaria de los barrios de Steel Harbor, ciudad hundida en el crimen y la corrupción mientras su retorcido mundo alternativo presentaba cyborgs, mutantes que parodiaban a los X-Men, experimentos y alienígenas, todos enzarzados en violentas rencillas. Mezcla brutal y excéntrica de novela negra y Amazing Stories que pedía trasladarse a la gran pantalla...o tal vez no, pues se hizo realidad de la peor manera posible, en esa época en que las adaptaciones de tebeos de acción y ciencia-ficción estaban a la orden del día, no con mucho éxito, así como las películas con fuertes y exuberantes protagonistas femeninas.
Y nadie había más exuberante que Pamela Anderson, aún en la eterna búsqueda de un papel que le permitiera saltar al estrellato, ¿pero era la más indicada para encarnar a un personaje de tan poca vida? Yo creo que Shannon Tweed o Cynthia Rothrock hubiesen sido mejor opción, porque además de que las cosas fueron mal cuando a Adam Rifkin le sustituyó el director de videoclips David Hogan, a quien ni siquiera permitieron ver el corte final, la rubia no atravesaba su mejor momento; maltratada por su marido (Tommy Lee), con aquel infame video casero sexual robado y circulando por todas partes y dependiendo de su físico para poder abrirse camino en las más pobres producciones, llevar el elaborado tebeo a carne y hueso no la iba a ayudar mucho...
Ni siquiera la larga (y espectacular) introducción ideada por ella misma donde su álter-ego nos regalaba un striptease siendo mojada por unas mangueras iba a servir para soportar el metraje restante. No tenía sentido la escena, pero desde las mesas un tipejo la insta a seguir desnudándose, llamándola "muñeca"...y de un taconazo en la frente acaba con él, o con lo que figuraba: ese público que sólo estaba deseando verla como en la cinta de vídeo, por tanto sus intenciones quedan claras. Y todo lo que sucede durante estos primeros minutos es sólo la típica introducción del héroe, una Barbara Kopetski que hace trabajos peligrosos por el mejor dinero que la ofrezcan a la vez que dirige el famoso pub Hammerhead, una combinación imponente de "Snake" Plissken, Nikita y el Bruce Willis de "El Último Hombre".
Pero lo más atractivo es el estilo visual, tan de los '90, tan cutre y excesivo, tan heredero de Cannon y las películas de Albert Pyun, y que reproduce bien los escenarios retrofuturistas y los ambientes cargados de violencia del tebeo, con cielos anaranjados a lo Tony Scott; el guión, sin embargo, deja ausente la colorida y alucinógena fauna que pululaba en las páginas y mete a su muñeca en un conflicto más típico de la ciencia-ficción "punk" post-apocalíptica de entonces, cuando una científica (Cora) intenta esquivar al despiadado Gobierno con la cura para un arma biológica, yendo tras sus pasos ese típico grupo de psicópatas que siempre tienen que ser nazis futuristas o por el estilo...
Se podría haber imaginado una trama más fantasiosa o más cercana al cine negro teniendo en cuenta los guiños a "Casablanca", pero este embrollo de conspiraciones, armas secretas, espionaje y dobles identidades recuerda a "Cyborg", "Desafío Total", "Rescate en L.A." y derivados del mismo orden. En él se cruzan diálogos vergonzosos y desagradables arquetipos con unas funciones no del todo claras (menos el hermano ciego, que desde el principio sabemos está para servir de cebo a los villanos), de los cuales se podría decir que Barbara es el Rick de Humphrey Bogart y Axel la Ilsa de Ingrid Bergman.
Pero la sentencia de muerte sucede porque Hogan no imprime ritmo al guión, y sus escenas de acción son rutinarias y sin emoción, mientras la sra. Anderson, que dio todo de sí misma, incluso se arriesgó sin dobles en algunas secuencias peligrosas, no puede evitar exponer algo más que sus excitantes curvas: su mediocre interpretación. Esta guerrera tan atractiva nos obsequia de vez en cuando con una profunda narración en primera persona, pero no se desarrolla de ninguna de las maneras, cae poco a poco y pierde credibilidad al ser sus actos dirigidos por otros, y no al revés (sobre todo cuando aparece su antiguo romance, Alex), y la intriga tampoco se mueve por muchos escenarios, desinflándose en el tedio.
Se insinúan, incluso muestran, detalles de su pasado que al final no son cubiertos por los cabezas huecas responsables del guión. Ni el resto de personajes, que no salen de los estereotipos, como esa Resistencia sin cabida en la historia, esa científica que sólo habla de sus planes unos minutos o ese villano ridículo en extremo (Pryzer) que en su última lucha con la protagonista sólo ríe compulsivamente; llegados a este punto ni la propia locura surrealista en la que se apoya el film lo salva. Todo huele a cutrez insoportable aquí. ¿Cómo alguien puede hacer tan aburrida una persecución llena de explosiones y disparos?, porque presupuesto hay, pero no destreza tras la cámara...
Ni delante, y eso que tenemos a Udo Kier, Temuera Morrison o Xander Berkeley en el reparto. No llega a la sensación nauseabunda de "Juez Dredd" ni a la tremenda vergüenza ajena de "Skyscraper", otra de acción con modelo Playboy; "BarbWire" simplemente está ahí, en mitad de todo y de nada, y reafirmó la mala estrella de Anderson, cuyo intento en el "gran cine" fue despreciado por crítica y público de forma muy cruel, pero en lo personal yo la prefiero mil veces antes que a la Carrie-Anne Moss de "Matrix" o a la Milla Jovovich de "El Quinto Elemento", así que para ella van dos puntos sin dudarlo, y el otro...
quizás porque, pese a todo, ofrece un rato de humilde entretenimiento.
10 de diciembre de 2023
10 de diciembre de 2023
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Hecha para el lucimiento del mito sexual de los 90, Pamela Anderson. Dicho sea que esta esplendida en la cinta y que se pasea una y otra vez embutida en un traje de cuero, unos tacones de aguja y un comportamiento que la hacen muy atractiva, aquí tengo que reconocer que el momento en que la vi por primera vez esta mujer estaba siempre en todos mis "pensamientos". Por lo demás un argumento simplón, unos personajes bastante planos y una escenas de acción mejorables. Como elementos a tener en cuenta, la música es excelente y bien encajada en un montaje estilo videoclip de la MTV y la ambientación de Puerto Acero es muy buena aunque abusando bastante de los filtros de tonos rojizos.
En definitiva un cinta enmarcada en su época, que vista 30 años después ha sido bastante bien tratada por el tiempo y que como curiosidad nos brinda poder ver a un joven Temuera Morrison años antes de dar vida a vida Jango Fett en la Star Wars Episodio 2.
En definitiva un cinta enmarcada en su época, que vista 30 años después ha sido bastante bien tratada por el tiempo y que como curiosidad nos brinda poder ver a un joven Temuera Morrison años antes de dar vida a vida Jango Fett en la Star Wars Episodio 2.
20 de enero de 2024
20 de enero de 2024
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Cuando uno se dispone a ver 'Barb Wire' sabe a lo que se expone. Una Pamela Anderson en toda su gloria, cuyo lado más sexual es explotado desde el minuto uno de la película sin haber una sola escena de sexo, lo cual ya es un logro de por sí, y una calidad que no pasaría por la prueba del mayordomo de Tenn.
¿Y por qué verlo? Pues precisamente por esas dos razones (ejem, ejem). A veces de mi cinefilia me sale mi lado más sadomasoquista.
Ciertamente, en principio esperaba una película de auténtico espanto, de las de querer la muerte más rápida e indolora antes que seguir viendo cada minuto que pase; mas aparte de ver a la vigilante de la playa, hay unos cuantos actores en el elenco como Xander Berkeley o Udo Kier con los roles que se le dan mejor (secundarios que aúpan el resultado global) y el paisaje post apocalíptico no está tan mal hecho.
Para todo lo demás es bastante olvidable. El villano es prácticamente un cliché, el guion es más simple que un paraguas y no existen escenas involvidables de acción o drama. O se explota a Pamela Anderson o el producto sería (aún más) irrelevante. Y aunque eso es exactamente lo que hacen, no consigue evitar no caer en la mediocridad. Pero yo ya sabía donde me metía y esto era el resultado más probable.
¿Y por qué verlo? Pues precisamente por esas dos razones (ejem, ejem). A veces de mi cinefilia me sale mi lado más sadomasoquista.
Ciertamente, en principio esperaba una película de auténtico espanto, de las de querer la muerte más rápida e indolora antes que seguir viendo cada minuto que pase; mas aparte de ver a la vigilante de la playa, hay unos cuantos actores en el elenco como Xander Berkeley o Udo Kier con los roles que se le dan mejor (secundarios que aúpan el resultado global) y el paisaje post apocalíptico no está tan mal hecho.
Para todo lo demás es bastante olvidable. El villano es prácticamente un cliché, el guion es más simple que un paraguas y no existen escenas involvidables de acción o drama. O se explota a Pamela Anderson o el producto sería (aún más) irrelevante. Y aunque eso es exactamente lo que hacen, no consigue evitar no caer en la mediocridad. Pero yo ya sabía donde me metía y esto era el resultado más probable.
3 de septiembre de 2024
3 de septiembre de 2024
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Con el reclamo de una Pamela Anderson en su punto más alto, David Hogan nos presenta un truño "futurista" en un presunto 2017. A veces con medios pero en líneas generales vaga, "Barb Wire" es la representación exacta de su póster. Una tipa muy malota y el resto da igual, soy Pamela Anderson, ponte a la cola.
Uno sólo puede limitarse a rescatar cositas y detalles para no catear aún más el film. Por ejemplo Temuera Morrison que está por encima de la cinta y se toma demasiado en serio su pésimo argumento y soporífera narrativa, o un Udo Kier que está en demasiados bodrios no podía faltar en este. Va de futurista y es completamente noventera, y ni siquiera tiene algo de valor en su temática. Esto es una especie de lucimiento de Pamela que regala numeritos y algún desnudo, pero poco más. Los diálogos a la altura de un film chusquero con el clásico "no me llames muñeca" a cada rato. Los personajes son lo peor que parecen ser así adrede para cogerles manía.
Imposible de tomársela ya sea a cachondeo. Uno sólo despierta con la plastificada protagonista y alguna escena de acción rescatable. En líneas generales horrible, aburrida y plana a excepción de los atributos que ya sabemos.
Para fans de Pam o como mera curiosidad.
Uno sólo puede limitarse a rescatar cositas y detalles para no catear aún más el film. Por ejemplo Temuera Morrison que está por encima de la cinta y se toma demasiado en serio su pésimo argumento y soporífera narrativa, o un Udo Kier que está en demasiados bodrios no podía faltar en este. Va de futurista y es completamente noventera, y ni siquiera tiene algo de valor en su temática. Esto es una especie de lucimiento de Pamela que regala numeritos y algún desnudo, pero poco más. Los diálogos a la altura de un film chusquero con el clásico "no me llames muñeca" a cada rato. Los personajes son lo peor que parecen ser así adrede para cogerles manía.
Imposible de tomársela ya sea a cachondeo. Uno sólo despierta con la plastificada protagonista y alguna escena de acción rescatable. En líneas generales horrible, aburrida y plana a excepción de los atributos que ya sabemos.
Para fans de Pam o como mera curiosidad.
9 de octubre de 2008
9 de octubre de 2008
10 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
En mi opinión una película ha de entretener y hacerte pasar un rato que te permita evadirte de la patética realidad que te rodea.
Si un film cumple esa función y no me aburre pues PERFECTO.
Para los PSEUDOCRÍTICOS del séptimo arte una peli ha de ser un tostón para convertirse en obra maestra y eso a MOI no le va.
Me da lo mismo lo que opinen sobre éste film en concreto....... a mí ésta peli me gusta bastante y la recomiendo.
Si un film cumple esa función y no me aburre pues PERFECTO.
Para los PSEUDOCRÍTICOS del séptimo arte una peli ha de ser un tostón para convertirse en obra maestra y eso a MOI no le va.
Me da lo mismo lo que opinen sobre éste film en concreto....... a mí ésta peli me gusta bastante y la recomiendo.
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