Noah Baumbach se ha afianzado con fuerza a partir del comienzo de siglo en el nicho de la comedia burguesa neoyorquina con toques de sofisticación intelectual al rebufo o mejor dicho a cierta proximidad del cine de Woody Allen, con un humor de incontinencia verbal cuyos frutos parecen ser más jugosos cuando le acompaña su musa, actriz y coguionista la estupenda Greta Gerwig. La fotografía de su habitual colaborador San Levy ayuda y mucho a enmarcar con gusto el ambiente urbano por donde deambulan sus personajes inquietos.
El problema a mi juicio es que solo se parece a Allen y salvo contadas excepciones en algunas escenas recordables la diferencia con el maestro siempre está presente. Así pues el cine de Baumbach, hasta la fecha, no encuentra su propia identidad ensombrecido por las similitudes con el maestro y sus historias y sus personajes se parecen mucho sin que las diferencias en las tramas prendan la chispa que marque la diferencia.
La comedia de esta treintañera que abarca pero no aprieta en su frenética vida se deja ver y se disfruta en sus interpretaciones con algunos momentos como la visita al vidente, estupendos. Al final uno sale con la sensación de que es más de lo mismo en el cine de Baumbach y que el techo que consiguió con la magnifica "Frances Ha", es un récord que le está costando batir.

Una obra maestra repleta de sencillez que nos muestra la realidad enérgica y cómica de unos personajes opuestos entre sí.
Diálogos atravesados y aparentemente cotidianos dignos para el desahogo que refleja la sencilla pero peculiar trama.
Personajes fáciles de amar por su mezcla de sencillez y complejidad, personajes que reflejan cada uno las diferentes facetas que la mayoría poseemos.

Una de mis debilidades es la ciudad de Nueva York, así que me lance de cabeza a Mistress America. Las aventuras de Tracy (Lola Kirke), persiguiendo cual perrito faldero a Brooke (Greta Gerwig), esa hermanastra recién conocida y que disfruta de una vida que, a primera vista, cualquier joven querría vivir en Nueva York, se convierte en inspiración de la escritora en ciernes que es Tracy. Pero la vida de Brooke no es todo color de rosa, y poco a poco Lola se va dando cuenta de las inseguridades y las carencias vitales de esa hermanastra idílica. Baumbach y Gerwig firman a medias el guión, que debe tener mucho de la improvisación de Gerwig en cada escena, pero que a la vez debilita la estructura de la película. No he conseguido engancharme al mundo que el duo Baumbach-Gerwig pretendía crear. Otra vez será.

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Durante un tiempo, se pudo catalogar a Noah Baumbach como el nuevo pope del cine independiente norteamericano. Ahora, tras el éxito de "Barbie" en la que pone su granito de arena, no sé si esa afirmación sería bien vista...

Aquí nos lo encontramos en una de sus primeras colaboraciones con su actual pareja y responsable de que el cine de Baumbach haya tomado los derroteros que ha tomado. Tan responsable que uno no sabe dónde empieza ella y termina Baumbach o a la inversa. Ambos se influyen e enriquecen mutuamente en una simbiosis cinematográfica que ya ha dado resultados espléndidos y que parece que nos dará más. Nos referimos, como no, a Greta Gerwig que se está ganando a pulso un sitio entre los cineastas (y las cineastas, no seamos) actuales. Pero más adelante nos pararemos más en ella y en su importancia dentro de la película, pero ahora seguiremos hablando de Baumbach, porque él es quien aparece acreditado como director.

Nos referíamos a él como el nuevo gurú del cine independiente e intelectual que parte desde Nueva York; un heredero, si se quiere de Woody Allen aunque he de reconocer que a mí algunas de las películas de Baumbach me han aburrido y me han parecido algo pedantes, aunque ni mucho menos llega al nivel de Josh Radnor, que también se postula como sucesor de Allen .

Como digo, algunas de sus películas me han parecido algo pedantes, aunque no es el caso de esta que nos ocupa. sus films no son comedias al uso ya que no es que sean desternillantes, son obras que se basan más en los diálogos que en las situaciones. para mí es una de las mejores películas que ha realizado (no puedo olvidar "Historia de un matrimonio") y se debe principalmente al personaje que compone Greta Gerwig. Uno de esos personajes que, de patéticos que son (en el sentido de "pathos") son humanos y actúan como tales, con sus virtudes y sus miserias. Aquí es donde Greta brilla realizando una interpretación brillante, llena de detalles.Gracias a esa complejidad del personaje que Gerwig hace suyo y a unos diálogos inteligentes (imposible saber con certeza qué se debe a Gerwig y qué a Baumbach, pero seguro que fruto de su colaboración) hacen de la película algo digno de ver.

Una comedia ligera, americana que parece europea. Dónde la relación de amistad que surge entre la hija de la futura mujer de la madre de esta chica que va a la Universidad será lo que perdurará a través de la relación que mantienen el padre y la madre.
Una comedia de superación, y de apoyo entre dos chicas, con final feliz.
Una comedia que me sorprende que sea americana al no tener acción, porque parecer de cine independiente austriaco.