Matrix

Está claro que las secuelas de la fallida saga no retoman para nada el meollo filosófico de la gran película inicial. Todo el despliegue técnico de aquéllas deja gusto a poco porque, a diferencia de lo que ocurre en Matrix, las escenas de acción (vueltas ya excesivas, redundantes y aburridas) carecen de todo significado más allá del mero espectáculo (que ciertamente no es lo que busca el admirador del planteo original). Los grandes temas de Matrix-original, el despertar a la verdadera condición existencial, a una percepción más cabal de la realidad y la posibilidad de luchar contra una prisión mental y conquistar un estado de libertad, colapsan en los planteos sucesivos. La mística de la liberación de la conciencia degenera en conceptos abstractos y sin correlato de significado en términos de nuestras propias vivencias. Los personajes pierden su sentido heroico para devenir en meras variables de un sistema que busca su propio buen funcionamiento, un sistema maquinal que finalmente es el que controla todo, incluso las rebeliones y revoluciones, los oráculos y los mesías. Perdemos un objetivo final, claro y trascendente, quedando toda la épica reducida a enfrentar una suerte de juego de obstáculos (llegar al cerrajero, llegar al arquitecto y toda esa fruslería digna de playstation).

Así que si aceptamos la saga como un conjunto, no me extraña que el sabor de boca final sea más bien amargo porque su mensaje termina siendo pesimista y desesperanzador, una serpiente mordiéndose la cola y dejando todo como al principio. Lejos de aportar una perspectiva inspiradora (como sí lo hace la película inicial), parece adelantarnos el resultado final, ominoso y aparentemente inevitable de un mundo que, como el nuestro, corre desesperadamente hacia la supremacía de una tecnocracia que buscará controlar hasta los más mínimos aspectos de la vida, reduciendo la especie humana a un vasto conjunto de variables que deben ser equilibradas en aras de afianzar un concepto de felicidad ciertamente análogo al de una colmena de insectos.